Siempre digo que la mejor manera de conocer una ciudad es planificarse bien, saber qué ver en cada lugar, crear un recorrido para no perderse ningún rincón importante y lo que más me gusta, callejear y conocer lo menos turístico, para descubrir aquellas tiendecitas escondidas y los pequeños restaurantes locales.
Si bien, hay veces que no tenemos el tiempo suficiente para hacerlo como nos gustaría y tenemos que elegir bien que monumentos emblemáticos conocer para llevarnos una primera impresión de una ciudad. Helsinki tiene 10 lugares que no nos podemos perder y os aseguro que no dejan indiferente a ningún viajero:
Mercado del puerto: Kauppatori
Este mercado al aire libre, localizado en el puerto muy cerca de la catedral Upenski, os sorprenderá. Lleno de puestecitos de comida, los fineses compran arenques, mermeladas de frutas y pepinillos en vinagre gigantes.
Os recomiendo que os deis una vuelta por el mercado para respirar el buen ambiente que hay, con música en vivo, barcos donde puedes degustar la gastronomía local y pequeñas embarcaciones donde poder comprar productos de la zona recién pescados.
Es un buen momento para descansar y comer tranquilamente sus famosas salchichas blancas mientras disfrutas de un día en el puerto. Sin duda, uno de los lugares que más me han gustado de Helsinki.
Catedral Ortodoxa Upenski
Esta catedral de ladrillo rojo y cúpulas doradas y verdes coronadas por cruces ortodoxas, te traslada de inmediato a Rusia.
Tras pasar el Puente del Amor, repleto de candados de todos los colores y tamaños, podrás localizar a lo alto la Catedral Upenski. Una vez dentro, el olor a incienso es fuerte, las paredes están llenas de pinturas, y el color dorado predomina en todas ellas.
Una vez fuera, puedes divisar desde lo alto las cúpulas de la Catedral luterana Tuomiokirkko.
Plaza del Senado y su fuente
La Plaza del Senado impresiona por lo grande que es. Según giras la calle, te la encuentras.
Edificios elegantes y coloridos, la casa de piedra más antigua de Helsinki, la fuente central donde turistas y locales se acercan a sentarse en los bancos que la rodean, para disfrutar tranquilamente de la mayor atracción de la plaza: la majestuosa Catedral Tuomiokirkko.
Catedral Luterana Tuomiokirkko
Es uno de los monumentos más famosos y queridos de la ciudad. Situada en lo alto de las escaleras que suben desde la plaza del Senado, en cuanto la veas, la sorpresa será grata. Es tan blanca, que parece como si la limpiasen todos los días. Sus columnas gigantes, sus puertas inmensas. Las cúpulas de color verde claro, decoradas con estrellas son la guinda del pastel.
Por dentro, tiene la característica sencillez de las iglesias y catedrales luteranas. Sin pinturas en las paredes, sólo destacan las preciosas lámparas anaranjadas que caen del techo y el enorme órgano que corona la parte central de la catedral.
Kiasma
Para los amantes del arte contemporáneo, este edificio moderno con cortes cuadrados y rodeado de césped verdes y esculturas de peces será una delicia.
Se encuentra enfrente del Parlamento, y al lado del Centro de Música. No tiene pérdida.
Avenida Esplendi
Una larga avenida, con un paseo muy agradable en el centro, y edificios emblemáticos y elegantes a ambos lados. Esta avenida es muy famosa en Helsinki y los fines de semana se llena de gente que la recorre para comprar en las mejores tiendas de la ciudad o que simplemente quiere sentarse en uno de sus cafés a relajarse y pasar la tarde.
Parlamento
El Parlamento, es un edificio austero pero llama la atención por su localización, enfrente del Museo de Arte Moderno.
Iglesia Temppliaukio
Sin duda una de las sorpresas del día. Comienzas a andar por un barrio residencial, y no puedes imaginar que, cuando menos te lo esperes, aparecerá frente a ti una iglesia excavada en la roca.
Cuando entras, es todo silencio. Tiene dos plantas, y no olvides subir a la segunda antes de salir, desde donde tienes una imagen panorámica de toda la iglesia. El techo, es una espiral gigante que hace que enloquezcas si lo miras mucho tiempo; los asientos de color fucsia, llaman mucho la atención y las paredes de roca hacen que esta iglesia sea una obra de arte.
Estación Rautatientori
Alrededor del mundo, hay estaciones de tren con un encanto especial, ya sea por su interior, como ocurre con la de Nueva York, o por su exterior, como ocurre con la estación de trenes y autobuses de Helsinki.
Plaza de la estación
En la misma plaza de la estación Rautatientori, llaman mucho la atención los edificios históricos que la rodean, estando ahora ocupados por empresas privadas y demás instituciones. El de la foto, es el edificio que más me gustó, con sus tejados rojos de aire medieval.
Más información para viajar a Helsinki:
Numerosas líneas aéreas vuelan a la capital de Finlandia desde las principales ciudades europeas. Su aerolínea oficial es Finnair. En mi estancia en Helsinki, volé con Lufthansa via Frankfurt.Una vez se llega al aeropuerto de Helsinki, las mejores opciones para llegar al centro de la ciudad son en autobús y en taxi. Éste último tarda 20 minutos en llegar, y cuesta unos 40 euros.
La opción más económica es el autobús. Se pueden comprar dos billetes, uno por 4,5 euros para le autobús público; y otro por 6,5 euros cogiendo el autobús oficial de Finnair. Ambos dejan en la estación de tren y autobús de Rautatientori, situada en el centro de Helsinki y tardan 25 minutos.
¿Qué os parece Helsinki? ¿Añadiríais algún lugar más como imprescindible?
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