Elegimos irnos durante el mes de agosto 13 días a Austria ¿Por qué Austria? Pues es difícil contestar la pregunta, hay muchos destinos a los que tenemos ganas, pero tras la pequeña escapada que hicimos a Alemania el otoño anterior, y los paisajes que allí pudimos disfrutar, pensamos que Austria era un buen destino (uno de los días haríamos una incursión a Alemania para otro lugar que nos apetecía mucho).Teníamos muchas ganas de paisajes y naturaleza, ganas de montañas, de verde, de paseos... ganas de Alpes y de casitas de madera. Muchas ganas de lagos y de pequeñas rutas. Ganas de alguna ciudad romántica y todo lo demás que fueran sorpresas. Además, como casi siempre, buscábamos un lugar que en verano no fuera axfisiante, más viniendo de un verano infernal en España. Esto fue una de las cosas que nos falló, en el Centro de Europa, no hacía especial fresquito la primera mitad de agosto de 2015.
Si te estás pensando en por qué ir a Austria y no ir a otro lugar, nosotros seguramente no tengamos la respuesta, solo podemos decir que es un buen destino para relajarse sin necesidad de estar parado, un lugar para desconectar, que tienes muchas cosas de interés que no son repetitivas, hay muchísimas actividades a tu alrededor, y tienes diferentes opciones para dar una vuelta a la climatología y no quedarte parado si ésta no te acompaña, o al menos muy parado. También, si tú eres de los que viajas con niños, nosotros sin tenerlos, tenemos la sensación de que es un destino genial para ir con ellos. En Austria han pensado en los más pequeños, hay planes, hay actividades y los lugares están adaptados para ellos, es un lugar seguro, estarán en contacto con la naturaleza, no se aburrirán y creemos que dormirán plácidamente cada noche.
Pero vamos a comenzar por el principio. Este diario, lo vamos a estructurar como los anteriores, esta primera entrada será para contar cómo organizamos el viaje, consejos prácticos, datos imprescindibles, vuelos, particularidades, y el resto será una entrada por día siguiendo nuestro itinerario, en el que os contaremos nuestra experiencia e intentaremos añadir algo de la Historia o curiosidades del lugar visitado.
Muchas veces, uno no sabe por dónde empezar, cojo los vuelos, cojo los hoteles, cojo el coche ¿Qué hago? ¿Por dónde empiezo? Esto, sobre todo, aumenta en dificultad cuando vas a estar recorriendo una zona en coche y tienes que sincronizar los lugares en los que vas a dormir con los lugares que vas a visitar, que a veces celebran fiestas, o son interesantes en días que no sean fin de semana... etc. Los comienzos en un país desconocido son difíciles porque no sabes ni cómo empezar. Así que desde tu primera idea a lo que acabes haciendo al final puede haber muchas variaciones. De hecho, puede que estés leyendo este diario en ese punto en el que solo sientes confusión, no te angusties, verás la luz, la verás...
Y para ver la luz con más intensidad, si vais a viajar a Austria os recomendamos que contacteis con su oficina de turismo vía web, en ella podéis solicitar información. Rellenas un formulario con tus intereses y, en cuestión de días, tendrás tu buzón (no el de correo web, el físico) llenito con un montón de folletos informativos. Y cuando decimos lleno, es que tardé 5 minutos en poder abrirlo, porque el cartero lo metió por el hueco a presión y eso no entraba, ni salía, ni se abría... hubo un momento que pensé en llamar a los bomberos para recuperarlo. Pero con paciencia, lo conseguí, sacando folleto a folleto... ¡Momentazo prevacacional!.
Nosotros en esta ocasión comenzamos por establecer los puntos de la ruta, aunque para ser sinceros, empezamos por hacer una simulación de los precios de los billetes y alojamientos, para ver de qué tipo de viaje se trataba (y suena el “clon clon clon” de las monedas mientras lo escribimos).
Esta vez no empezamos con demasiada antelación, sería un par de meses antes de partir.
En función de la simulación empezamos a pensar en cuántos días nos podríamos permitir y, de los que ponemos inicialmente, generalmente acabamos sumando un par de ellos más al final de la planificación.
Los puntos de la ruta es lo que más cuesta, al principio se cogen unos cuantos, luego más o menos eso te sirve para saber cuánto tiempo estarás en cada lugar alojado y poder reservar con tiempo para que no suba demasiado de precio. Y posteriormente, en los meses que quedan hasta que vayas, empezarás a agobiarte porque hay muchas cosas que ver, y no te caben. Así que llegará el momento de tener que elegir... ¿Qué dejo en el tintero? Y también te puede pasar el decir ¿por qué no cogería una noche más aquí? Pues porque es así... planificas por lo que lees, bastante bien te ha salido, no te agobies, seguro que has elegido bien. No hay una fórmula mágica para acertar.
Una cosa muy importante, muchos de vosotros, cuando pensáis en este país, tendréis en mente hacer pequeñas excursiones de senderismo, o quizá más extensas. Nosotros teníamos ganas de adentrarnos en las montañas, hacer algunas rutillas, y no había manera de encontrar ninguna que no fuera haciendo noche. Bueno, al llegar allí entendimos por qué en los blogs y foros se hablaba de forma tan general del senderismo de 2-3-4-5 horas, y es porque una vez que cojáis una telecabina, allá donde os deje, habrá varias señales con la distancia a recorrer y el tiempo que lleva, para que tú elijas qué tipo de sendero realizar. Está muy bien indicado y señalizado y hay variadas opciones, desde el paseo de media hora hasta rutas más largas. Así que dejarlo un poco para la improvisación, aunque nosotros os iremos dando los datos de lo que hicimos.
Para viajar a Austria tienes diferentes posibilidades a la hora de coger los vuelos. En nuestro caso, volamos a Munich (Alemania), un aeropuerto muy conocido para "el que no escribe", como os contamos en el Diario de Baviera, y que además te ofrece la oportunidad de obtener vuelos bastante asequibles.
Volamos con Lufthansa. A un precio similar, aunque sea un poco más alto, que otras compañías, nos gusta bastante más, mantiene un poco la filosofía del "ayer", asientos más amplios, te dan de desayunar, comer o cenar, no son estrictos con las maletas... (no es publicidad, es una opinión basada en nuestra experiencia).
Además, coincidía que alquilar el coche en Munich, también nos salía más económico que en Austria. Y la ciudad está relativamente cerca de la frontera con el país. Tan solo dos horas (sobre papel) separaba nuestro primer alojamiento del aeropuerto.
Por supuesto, existe la opción de volar a Salzburgo, de volar a Innsbruck o de volar a Viena. Las dos primeras las descartamos por practicidad y economía. La tercera, por economía y porque no encajaba en nuestra organización. Es decir, hemos estado 13 días en Austria y hemos decidido dejar la ciudad de Viena para un fin de semana largo en otras fechas. Viena necesita su tiempo. Cuando empezamos a organizar el viaje nos dimos cuenta que solo con la zona de Salzburgerlan y Tirol ya íbamos justos de tiempo. Aquí cada uno tendrá que establecer sus prioridades.
Además, mirando un poco por internet, llegamos a la conclusión de que el tiempo en la zona era variable, con lo que no se debía ir estableciendo una noche en cada lugar, porque si te llovía te quedabas totalmente vendido y no tenías tiempo para rectificar. Por lo tanto, decidimos buscarnos 3 alojamientos para 3 zonas, relativamente cercanas, y así en función de cómo saliera el día tener cierto margen de maniobra. Es decir, no llevar un planning excesivamente rígido.
Así, pasamos 5 noches en la zona de Salzburgerland (Golling an der Salzach) y 7 noches en la zona del Tirol, divididas en dos alojamientos diferentes (4 noches en MIttersill y 3 en Fulpmes). Queríamos disfrutar cada día sin hacer demasiados km...
El coche lo cogimos con AVIS, con seguro a todo riesgo, que nunca consigues que te cubra todo y, de una manera u otra, siempre quedan cosas fuera de la protección. Mejor no pensarlo. El alquiler, más caro que en nuestros anteriores viajes, todo sea dicho. Cogiendo categoría C, nos dieron un Fiat 500XL que, si bien te permitía mirar desde las alturas al mundo y parecía amplio, su maletero engañaba y había que jugar al Tetris en cada uno de los cambios de alojamiento.
Pasar de Alemania a Austria en coche de alquiler no suele suponer un coste extra, pero sí debéis comunicarlo para evitarse sorpresas desagradables. Lo que sí es muy importante, es que adquiráis la Viñeta (Vignette) si vais a coger sus autopistas.
La Vignette es una pegatina imprescindible para circular por la autopistas austriacas (en agosto de 2015, 10 días costaban 8,70 euros). Se adquiere en las gasolineras cercanas a la frontera. Si venís de Munich, la frontera se encontrará ya bastante cerca de Salzburgo. En seguida aparecen los primeros carteles en la carretera que te indican que en la próxima gasolinera se vende la pegatina. Una vez que la adquieres, tienes que pegarla en la luna delantera del coche en la esquina izquierda, o debajo del retrovisor central interior. Pasados los 10 días, si la sigues necesitando, deberás adquirir una nueva. Solo es necesaria para las autopistas.
Si alquiláis el coche en Austria, probablemente el coche ya vaya con la pegatina incluída.
Ahora os íbamos a hablar de la ropa que se debe llevar en verano a Austria, y entonces nos hemos acordado de cuando hablamos de la ropa que se debe llevar a Escocia, y no podemos dejar de pensar si nos tocan todos los veranos atípicos a nosotros. En Austria, al igual que en Escocia, en verano llueve... En Escocia no nos llovió, y en Austria nos llovió solo un par de días, pero lo más atípico es que aquí nos hizo un calor que hacía años que no hacía en la zona, según nos dijeron.
Así que, qué os vamos a decir, llevad de todo. Y cuando decimos todo, es que aquí es necesario que metáis el kit piscina en la maleta. Pensad que en nuestra ruta os vamos a llevar de baño por los lagos por los Alpes, y vamos a llegar hasta un glaciar, pisar hielo y nieve. Os vamos a meter en una cueva de hielo donde hay que entrar con forro polar, gorro y guantes. Así que, lo primero, impermeable, eso viene bien siempre. Botas de montaña, pantalones largos y cortos. Cuando hace calor es húmedo, eso para madrileños como nosotros es la muerte en vida, ya nos leeréis el día de visita a Salzburgo o entros de los días de las vacaciones. Pero el verano puede salir diferente. Es normal tener temperaturas bajas al caer la tarde, así que no lo dudéis, manga corta y manga larga.
Bañador, eso no os lo podéis olvidar, chanclas y toalla. Si tenéis pies de gato de estos de bañarte en el río, pueden venir bien para los lagos, aunque nosotros no los hemos usado. Si tenéis niños y no saben nadar, algo para que floten y unas cangrejeras, a tu hijo le encantará verse en unos años en medio de un lago en los Alpes como el Rey del Mundo (con manguitos o lo que corresponda en las nuevas corrientes de la paternidad o maternidad que desconocemos, perdonadnos si los manguitos es un invento vintage y estamos obsoletos, no es nuestro mundillo jeje) El bañador también puede seros muy útil para visitar alguno de sus SPAs o termas, hay infinitas y para los días de lluvia pueden ser un filón. Como no llovió al principio no llegamos a usarlas, pero os hablaremos de ellas.
Alojamientos, Austria es un lugar dónde el alojamiento, si quieres, te puede salir bastante económico, comparándolo con otros lugares de Europa. Hay hoteles pero, principalmente, encontraréis por las zonas de los valles lo que llaman Gastehof, pensiones, granjas, vamos principalmente alojamiento rural. Si os metéis en la página web de cada pueblo (que suelen tenerla) allí directamente se ofrecen habitaciones o casas completas a precio competitivo. Nosotros, al final optamos por alojamientos que aparecían en centrales de reservas, porque buscábamos, si era posible, que tuvieran piscina, o bien al aire libre o climatizada. En las entradas correspondientes os iremos hablando de los alojamientos seleccionados. Pero recordad, es interesante mirar las páginas de las localidades.
El siguiente punto importante a tratar son las tarjetas turísticas. En Austria hay muchas tarjetas de turismo que generalmente van por zonas.
Como os hemos comentado, nuestro viaje se centró en la zona de Salzbugerland y en el Tirol. Estas tarjetas suelen salir rentables, aunque tenéis que valorarlo personalmente en función de los días que vayáis a estar y lo que os guste hacer. Nosotros usamos 2 de ellas: Salzburgerland Card y Stubai Card.
Salzburgerland Card: Esta tarjeta tiene un precio de 65 euros para 5 días. Con ella tienes acceso a varias atracciones de la zona, a áreas de recreo (piscinas abiertas), telecabinas, SPAS, trineos de verano, e incluye 24 horas en Salzburgo donde cubre casi todos los puntos de interés turístico, así como el transporte público. Se adquiere en las oficinas de turismo, te evita pasar por taquilla en la mayoría de lugares y con su adquisición, o bien con la información solicitada previamente a la oficina de turismo, te proporcionan un libro con todo lo que incluye. Algo que te ayudará a organizarte. Es especialmente interesante por el acceso a las telecabinas, que son carillas. A nosotros nos ha encantado la experiencia con ella.
Stubai Card: Esta tarjeta cubre algunas atracciones del Valle de Stubai (en el Tirol), principalmente telecabinas y el trineo de verano de Mieders, así como algún descuento. Hay algunos alojamientos en los que solo con reservar con ellos ya te regalan la tarjeta y no la tienes que adquirir. Algo que podéis valorar. El nuestro no lo incluía y ya os contaremos por qué al final nos lanzamos a cogerla, porque al principio no lo teníamos claro.
Además de éstas dos tarjetas están la Otzal Card (Valle de Otzal), la Innsbruck Card (para la ciudad de Innsbruck), la Salzburg Card (solo para Salzburgo ciudad), la Hohe Tauern Card, muy parecida a la Salzburgerland... y seguro que hay más porque eso es un no parar... (Ahí toca darse una empollada al tema).
La comida, qué os podemos decir, en principio pensábamos hacerlo como en Escocia, llevar nuestros aprovisionamientos y montarnos picnics en la montaña, pero al final solo lo llevamos a cabo un par de días. Hacía mucho calor, no estaba la cosa para llevar alimento en el coche, eso no podía traernos nada bueno. Por otro lado comer allí no es muy caro, tienen buenas ensaladas (son un filón), tienen salchichas, tienen schnitzel (lo hacen bien los tíos, es nuestro escalope), en general casi en cualquier sitio que vayas verás un lugar para comer. Ya os iremos contando... pero no comimos mal, teniendo en cuenta que nuestras expectativas no eran altas antes de llegar.
El itinerario de este diario de viaje va a ser el siguiente:
Día 1: Madrid - Munich - Liechtensteinklamm - Golling an der Salzach (dormir en Golling an der Salzach)Dïa 2: Trineo de Verano Abertnau - Hallstatt - Gossausee- Cascada de Golling (dormir en Golling an der Salzach)Día 3: Salzburgo- Palacio Hellburn (dormir en Golling an der Salzach)Día 4: Saint Wolfgang - Carretera Panorámica de Postlam - Telecabina St Gilgen - Mondsee - Golling (dormir en Golling an der Salzach)Día 5: Alemania: Konigsee - Obersee - Ramsau (dormir en Golling an der Salzach)Día 6: Cueva de Hielo - Zell am See (dormir en MIttersill)Día 7: Carretera de Grossglockner (dormir en Mittersill)Dïa 8: Rattenberg - Alpbach -Pertisau (Lago Achensee) - Lago Heintersteinersee - Kufstein (dormir en Mittersill)Día 9: Cascadas de Krimml - Schwarzsee (dormir en Mittersill)Día 10: Innsbruck - Fulpmes (dormir en Fulpmes)Día 11: Valle de Stubai: Top of Tyroll - Grawa wasserfall - Neustift (dormir en Fulpmes)Día 12. Valle de Otzal: Stuibenfall - Sölden - Oetz (dormir en Fulpmes)Día 13 Valle de Stubai. Telecabina de Neustift - Top of Tyroll - Aeropuerto Munich - Madrid (dormir en casa)
Seguro que muchos os estáis haciendo preguntas prácticas después de esto, como cuántos km hicimos en coche, de qué presupuesto estamos hablando, os dejamos un resumen en cifras a esas cuestiones.
Total de km recorridos: 2.200
Coste final todo incluído (todo es todo) para dos personas (comiendo y cenando en restaurante, dándonos algún caprichillo y teniendo en cuenta que no somos especialmente antojadizos): 3.150 Euros. Esta cifra se puede reducir buscando otro tipo de alojamiento (más económicos, o apartamentos o casas, donde tú puedas cocinar, algo bastante frecuente allí).
Y bueno, nosotros en este caso no llevamos seguro médico, pero sí la tarjeta europea de salud ¿Qué más llevamos? Dos maletas de cabina, una maleta grande, muchas ganas, dos cámaras, un trípode, mochila y ganas de frescor.
¿Qué nos encontramos? Calor, nieve, solazo, niebla, lluvia, verde, praderas de Heidi, edredones doblados sobre las camas, cascadas, glaciares, cenas antes de las 20.30, baños en lagos verdes, en lagos turquesas, lagos verdes y turquesas simultáneamente, lago negro, avispas, mosquitos, medias de lana a 37 grados, vacas, montañas, ríos azules y ríos grises, carreteras de película, un idioma impronunciable e ilegible, simpatía, risas, más calor, ciudades de cuento y pueblos de ensueño, flores, bancos sin sombra y sombras sin bancos... diversión, cansancio, paz... y una experiencia maravillosa.
Y ahora, os lo vamos a intentar enseñar... ¡Austria, allá vamos!
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