Nuestras aulas son un tapiz de estudiantes con diferentes culturas, circunstancias socioeconómicas y habilidades. Hay diversidad social, emocional, física e intelectual, incluso dentro del grupo aparentemente más coherente de los estudiantes, lo que significa que también hay desafíos a la enseñanza de diversos grupos.
Se me ocurren algunas ideas de cómo hacer un aula inclusiva:
Por ejemplo..
1. Utilice Visuales
El uso de elementos visuales para enseñar un concepto es muy eficaz. Anclar cuadros, carteles, diagramas y mapas han sido recursos utilizados para la enseñanza. Sin embargo, elementos visuales también pueden ser utilizados para hacer el plan de estudios más accesibles más allá de las áreas temáticas. La creación de un programa diario, usando relojes y temporizadores, etiquetas de identificación, etiquetas o símbolos para materiales de clase … todo puede tener un impacto positivo significativo en el aprendizaje de los estudiantes.
Los visuales en el aula pueden crear transiciones suaves entre las actividades. Los estudiantes pueden predecir y prepararse para el cambio, saber dónde se encuentran los materiales cuando sea necesario. Las ayudas visuales de apoyo son un elemento importante del proceso de inclusión.
2. Asignar trabajos en el Aula
Aparentemente simple, la asignación de “pequeños trabajos en el aula” apoya un componente central de la inclusión. Aparte de los trabajos académicos, la educación inclusiva también es compatible con el desarrollo social y emocional de los estudiantes. Debido a la amplia gama de habilidades y atributos de los estudiantes, a éstos se les debe enseña a aceptar la singularidad del otro.
Una forma de ayudar a construir la aceptación es asignar a cada estudiante un trabajo de aula. Ya sea a diario o semanalmente, un trabajo de clase es la responsabilidad del estudiante. Se requiere que el estudiante demuestre su liderazgo y capacidad para contribuir a la clase. A su vez, el estudiante se siente valorado y necesario.
3. Proporcionar Elección
Proporcionar a los estudiantes la oportunidad de expresar libremente sus habilidades, talentos y preferencias. Al proporcionar a los estudiantes estas opciones, los profesores pueden crear lecciones y experiencias que lleve a los estudiantes a estar más motivados.
Ofrecer la opción a los estudiantes de responder a la materia, la evaluación, integrarlos en las rutinas diarias . Además, dar la opción a los estudiantes en base a la capacidad o interés.
4. Cambie el orden de asientos
Con demasiada frecuencia, los estudiantes reciben una asignación de asientos en el comienzo del año escolar y luego se espera que permanezcan en el mismo lugar hasta el último día de clases. Con ese tipo de estrategia de gestión de la clase, los estudiantes se limitan a interactuar con sólo unos compañeros de clase de los alrededores.
Para facilitar la inclusión de los diferentes estilos de aprendizaje, los profesores pueden volver a asignar asientos . Es importante, sin embargo, que tengamos en cuenta que este tipo de cambio puede no ser beneficioso para todos los estudiantes y hacer ajustes cuando sea necesario.
5. Padres como Socios
Los padres son el recurso más importante que un profesor puede tener en el aula. Un padre tiene conocimientos valiosos que pueden apoyar la educación de sus hijos. Por lo tanto, es esencial los padres como una parte importante de un aula inclusiva. Los padres se sienten valorados a través de boletines de clase, comunicados etc…
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