5 series animadas para adultos

Luego de un genial artículo sobre series infantiles que los adultos deberían ver, realizamos un top 5 de series puramente para adultos.

Podríamos decir que Los Simpson y South Park fueron algo así como pioneros en caricaturas animadas para adultos (aunque la primera siempre estuvo pensada como apta para niños), y lo más probable es que si sos un adulto sub-40 y conociste Locomotion, puedas citar unos cuantos títulos más que nos harían llorar de nostalgia frente a nuestras pantallas.

Si te gusta el género, o la idea de que existan dibujitos hechos por y para adultos en los que verdaderamente todo vale y todo puede pasar, tengo buenas noticias para vos: las series animadas para adultos no murieron, nunca dejaron de existir, y aquí les va un top five para ponerse al día, o seguir mirando alegremente:

1. ARCHER

Esta serie gira alrededor de las actividades de la agencia de espías ISIS (International Secret Intelligence Service). Su protagonista, Archer, es un tipo machista y narcisista, considerado el mejor y más peligroso agente del mundo, que se dedica a combatir el crimen a nivel internacional. Su colega y mano derecha es su ex novia, Lana Kane, y su jefa es su propia madre, Malory Archer. Edipo, un poroto.

La ubicación temporal de la serie es confusa y anacrónica, ya que mezcla tecnologías, estilos, modas y hasta enemigos de distintas épocas, incluyendo referencias a la Unión Soviética y la Mafia Italiana, por ejemplo. 

¿La perlita? Las voces de muchos de los personajes de Archer están hechas por protagonistas de la serie “Arrested Development” (Jessica Walter, Jeffrey Tambor, David Cross, y Judy Greer), y su creador, Adam Reed, se ha referido a la caricatura como “el encuentro entre James Bond y Arrested Development”, por la trama de conspiraciones, competencia y engaños que subyace en las relaciones de la familia Bluth.

2. BOB’S BURGERS

Bob’s, creada por Loren Bouchard, es mucho más familiar en términos de contenido, básicamente porque tres de sus protagonistas son niños: los hijos de Bob, el dueño de un restaurante de hamburguesas. La menor, Louise, es una Bart Simpson femenina y recargada, mucho más ambiciosa e inteligente, lo cual la hace necesariamente más peligrosa; le sigue Gene, un niño muy… feliz; y la tercera es Tina, una preadolescente de 13 años con las hormonas muy, MUY a flor de piel. La madre de las criaturas es Linda, y los 5 trabajan alternadamente en el restaurante, que es algo así como el sueño de la vida de Bob. Él ama sus hamburguesas. Las ama.  

Si bien el humor y los códigos de este show tienen cierto cariz más infantil, los temas y el subtexto son bastante más profundos de lo que parece; además, hay malas palabras, chistes racistas y de clase, referencias sexuales, y aventuras típicas de la infancia, vistas con los ojos de niños muy poco típicos.

Guiño simpático: la voz de Bob es el genial H. Jon Benjamin, el mismo que hace la voz de Archer. 

A medida que avanzan las temporadas (este mes estrenó la 5ta), las personalidades y el crecimiento de los personajes suben la apuesta de hilaridad, incluso los que parecen clichés, y eso hace de Bob’s Burgers una serie para seguir de cerca.

3. AMERICAN DAD!/FAMILY GUY/CLEVELAND’S SHOW

Son tres series diferentes, con personajes diferentes y, hasta cierto punto, enfoques diferentes, pero las recomiendo en bloque porque siguen cierta fórmula de familia tipo que lidia con los problemas propios de la convivencia, el mundo de los niños y su crecimiento, las relaciones maritales, y condimentos particulares que varían con la ocupación del personaje principal. A saber:

• En American Dad!, los protagonistas principales son el agente de la CIA Stan Smith, su esposa Francine, los hijos adolescentes Hayley y Steve, y las mascotas de la familia: un alien llamado Roger y el pez dorado Klaus.

• Family Guy se centra en la vida de los Griffin: Peter y Lois son los padres de los adolescentes poco carismáticos e inadaptados Meg y Chris, y del bebé Stewie, que maquina todo tipo de planes malvados. Completa el cuadro Brian, un perro que puede hablar e interviene en los asuntos familiares como un miembro más, ya sea dándole consejos a Lois o cuidando de Stewie. Los amigos de Peter tienen una gran participación en el show, y uno de ellos logró un spin off – aquí es donde entra:

• The Cleveland Show cuenta los problemas de la familia ensamblada de Cleveland Brown y su nueva esposa Donna Tubbs. La pareja convive con dos hijos de ella, la adolescente rebelde Roberta y el preadolescente Rallo, y el niño de él, Cleveland Jr. En esta serie en particular, abundan los chistes racistas – porque, bueno, sus protagonistas son negros. La serie fue cancelada hace un par de años, pero FX la sigue transmitiendo en Latinoamérica. 

¿Qué otra cosa tienen estas tres series en común? Seth MacFarlane. Él es el creador de Family Guy en primer lugar, y co-creador de Cleveland Show, junto con Richard Appel y Mike Henry, y de American Dad!, donde trabaja con Mike Barker y Matt Weitzman.

El humor en estas series se basa en los estereotipos de religión, estatus sociales, el machismo y homofobia. Si conocen el estilo de MacFarlane, responsable, entre otras cosas, de caricaturas como Johnny Bravo y La Vaca y el Pollito, y de la película Ted (sí, la del oso de peluche gigante), estas series son lo suyo.

4. BOJACK HORSEMAN

Producción original de Netflix, la perlita animada del 2014: BoJack es un caballo actor que, en sus años de juventud, supo ser la estrella protagonista de “Horsin’ Around”, pero que ahora se encuentra retirado, sin demasiado sentido ni dirección en la vida, viviendo en Hollywood y rodeado de un glamour gastado que por momentos le da náuseas. BoJack planea su regreso triunfal a la fama mientras escribe un libro de memorias, para lo cual contrata a la escritora fantasma Diane, que lo ayuda a redactar y poner sus experiencias y recuerdos en orden. Juntos lidian con las presiones de la mánager/novia eventual de BoJack,  la gatita Princess Carolyn, y la competencia del perro Mr Peanutbutter, su contraparte en “Horsin’ Around”.

Creada por  Raphael Bob-Waksberg, la serie arranca con una apuesta de humor fuerte, pero funciona como un velo que se va corriendo a medida que la trama y los episodios avanzan, y el guión se vuelve un poco más oscuro, crítico y analítico. Es una lluvia ácida e irónica sobre el mundo de la fama, los lugares de poder y los costos que hay que pagar para sostenerlos.

Detalle: El actor Will Arnett (Gob Bluth en “Arrested Development”), es la voz protagonista de la serie, porque todo queda en familia y nos gusta así.

5. BRICKLEBERRY

La premisa de este show es bastante simple y quizás este es el motivo por el cual se permite tocar y rebotar por temas variados de forma escabrosa, ofensiva e hilarante por igual: Woody Jhonson es el líder de los guardabosques del Parque Nacional Brickleberry, y tiene a su cargo a Steve, el permanente Guardabosques del Mes, Denzel, un estereotipo del afroamericano gerontofílico, Connie, una lesbiana con exceso de peso y sentimientos a flor de piel, y Ethel, una rubia que de vez en vez recuerda que tiene principios y el deber de defender a los animales. 

En términos de contenido adulto, Brickleberry es quizás la serie más literal de la lista: homofobia, misoginia, racismo, discriminación de clase, género y religión, filias, violencia de todo tipo y contra todo tipo de criaturas. Los creadores, Waco O’Guin y Roger Black, recibieron todo tipo de críticas, y las malas fueron tan agresivas que pusieron en duda su continuidad. Sin embargo, hay algunos capítulos nuevos y aparentemente la nueva temporada está en producción.

En todo caso, es cierto que no es del todo apta para personas demasiado sensibles, así que Brickleberry va recomendada con bandera roja.

Las series para adultos existen y están ahí; es cierto, ya no hay un canal que las transmita a todas juntas en bloques de programación gloriosos (volvé Locomotion, por favor), pero vale la pena hacer zapping entre FX, Comedy Central y Adult Swim, o abonarse a Netflix y gozar, además, de la posibilidad de verlo en orden. La Internet es maravillosa.

2014-10-15 Lucía Frank Langer