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6 datos sobre el cerebro de los gatos que te sorprenderán

Por Pablozisuke

Los gatos son más reservados que los perros y muchas veces los dueños no saben mucho sobre su gato.

6 datos sobre el cerebro de los gatos que te sorprenderán

¿Por qué los gatos despiertan a sus dueños por la noche? ¿Recuerdan a sus primeros dueños? ¿Los gatos y los perros son igual de inteligentes? Aquí tenemos las respuestas a estas preguntas y ahora compartimos contigo datos sobre el cerebro y la memoria de los gatos.

Los gatos recuerdan bien lo que pasó hace mucho tiempo

Los gatos son mascotas que tienen una muy buena memoria. Recuerdan personas, lugares y eventos para toda la vida, especialmente entre las edades de 2 a 7 semanas. Entonces, el lugar de nacimiento y los primeros dueños permanecen en la cabeza de los gatos durante muchos años.

Los gatos también son buenos para crear asociaciones. Por ejemplo, si la primera experiencia de viajar en un transportín es desagradable para la mascota, más adelante desconfiará de este artículo.

El cerebro y los ojos de un gato están conectados

¿Has notado cómo los ojos de un gato brillan con poca luz? Sí, es tan hermoso: amarillo, verde o incluso rojo. Este brillo es posible gracias al tapetum, una capa de células ubicada detrás de la retina. Como un espejo, refleja las fuentes de luz: una pantalla de televisión, el resplandor de una linterna, la llama de una vela.

La retina del ojo está directamente conectada con la corteza visual del cerebro. Podemos decir que el cerebro "ilumina" el campo de caza del gato en la oscuridad.

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Los gatos se aburren sin actividad cerebral

Y por aburrimiento, a menudo se comportan destructivamente. Los gatos domésticos, al igual que sus antepasados ​​salvajes, no pueden vivir sin el movimiento y la caza. Si no le das a la mascota que derrame energía, comienza a aburrirse. Y él mismo está buscando una ocupación ... que al dueño puede no gustarle.

Por eso, es tan importante estimular el cerebro del gato: darle juguetes, esconder comida en rincones inesperados, equipar lugares en altura para observar la situación. Es genial si el gato tiene la oportunidad de sentarse en el alféizar de la ventana y mirar a través del vidrio lo que sucede en la calle.

El cerebro de una gata la motiva a cazar al atardecer

Todo dueño de gato ha estado en una situación: en la madrugada el gato te despierta con su “miau”, cierras la habitación o vas a darle de comer a la mascota, y luego intentas volver a dormirte… ¿Familiar?

¡No te ofendas! El cerebro del gato está diseñado de tal manera que lo motiva a estar activo al anochecer y al amanecer. El gato te despierta porque ese es el tiempo que necesita para conseguir su "presa", es decir, la comida.

¡Sin embargo, hay buenas noticias! El comportamiento crepuscular se puede corregir. Las investigaciones muestran que, con el tiempo, los gatos se adaptan al estilo de vida de sus dueños. Es decir, si tú duermes, la mascota también duerme. El proceso de sincronización se puede acelerar jugando con el gato durante el día, de modo que esté cansado por la noche, y alimentándose mucho antes de acostarse.

El cerebro necesita taurina

La taurina es un aminoácido que es esencial para el cerebro, el corazón y la digestión de un gato. A diferencia de otros animales, los gatos no pueden producir taurina por sí mismos. Por ello, es importante asegurarse de que una mascota desde pequeña lo reciba con la comida.

Por sí sola, la taurina se encuentra en la carne, el pescado y las vísceras crudas. Para los gatos modernos, dicha nutrición no es útil, por lo que los fabricantes de alimentos incluyen este aminoácido en las dietas preparadas.

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Los gatos cuentan con un cerebro más complejo que el de los perros

¿Son los gatos más inteligentes que los perros? Es imposible decirlo de manera inequívoca, porque "inteligente" significa algo diferente para todos. Pero hay un hecho científicamente probado: en la corteza cerebral de los perros hay 530 millones de neuronas, en los gatos, 230. Al mismo tiempo, la densidad de neuronas por milímetro cuadrado de la corteza es mayor en los gatos.

Esto no significa que los gatos sean más inteligentes que los perros. En la capacidad de construir asociaciones y la capacidad de cazar, sí, los superan. Pero los perros tienen una inteligencia social más desarrollada y son más dóciles al entrenamiento. Entonces cada uno es inteligente a su manera, solo que el cerebro del gato es un poco más complicado.

Comprender cómo funciona el cerebro del gato facilita la vida tanto de la mascota como de su dueño. Si mantiene a su gato ocupado con los juegos, le da la comida adecuada y se lo muestra al veterinario de manera oportuna, la mascota será inteligente y feliz toda su vida.


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