7 Clases de Amigos Que Hay Que Conservar

¿Qué amigo te llevarías a una isla desierta? Yo lo tengo claro: uno que sea un campeón en la resolución de problemas, alegre y gran conversador. Por lo que a mí respecta creo que me he relacionado con el suficiente número de personas como para saber que algunas de ellas podrían garantizar mi supervivencia en una situación límite, además de hacer de esta última una experiencia sorprendentemente llevadera.
Un amigo así es alguien a quien deberías incluir en la categoría de "amigo para siempre" (por si acaso). Pero no es el único. Hay otras clases de amigos que nos conviene buscar, tener y conservar. Los siguientes son aquellos a los que yo les dedicaría Hay un amigo en mí en un karaoke; en el caso de que a mí me gustara cantar en los karaokes, claro. 
"Otros habrá tal vez mucho más listos que yo  Eso puede ser, tal vez Más nunca habrá quien pueda ser Un amigo fiel y tú lo sabes."

7 Clases de Amigos Que Hay Que Tener
1. El Auténtico
El auténtico está el primero de la lista porque no hay otro amigo como él. Su verdad está al descubierto. Es tal cual le ves: nada pretencioso. Perdona tus errores, nunca te juzga. Con él todo fluye porque puedes dejar la careta en casa y ser tú mismo. Vuestras charlas son interminables; te sientes libre de hablar de cualquier cosa, incluso de aquellas que os hacen vulnerables.
2.  El Señor Lobo
Es ese amigo que soluciona los problemas cuando el resto estáis bloqueados. Imbatible en su eficiencia a la hora de arreglar desaguisados. El Sr Lobo no se deja intimidar, mantiene la calma en cualquier situación y limpia la sangre sin hacer más preguntas que las necesarias para sacarte del atolladero.
3. El Cheerleader
Te ve llegar y ya está agitando sus pompones. Cuando se trata de levantarte la moral el animador es único obrando su magia personal: Te motiva, te piropea, se comporta como tu más grande admirador. Es un amigo que merece la pena conservar porque celebra tus alegrías y tus victorias como si fueran suyas.
4. El Entusiasta
Su entusiasmo es contagioso: propone planes divertidos, se apunta encantado a los que tú propones, siempre te descubre cosas nuevas que hacer en tu ciudad. Es un disfrutón nato que casi nunca pierde la sonrisa y el buen humor. Por supuesto que también tiene sus problemas pero incluso al hablarte de ellos lo hace sin dramatizar. El amigo entusiasta a veces tiene un punto de locura que resulta de lo más refrescante.
5. El Padre Te regaña cuando piensa que estás metiendo la pata, puede que hasta te corte el rollo en más ocasiones de lo que te gustaría. Ahora bien, sabes que puedes contar con él para llorar en su hombro y prepararte una taza de chocolate caliente. Su consistencia, buen juicio y gran corazón son tu roca.
6. El Mudo
Pase lo que pase sus labios están sellados. Te cubre las espaldas y es el mejor poniendo cara de póker. Por lo que a tus indiscreciones respecta, él no ha visto ni oído nada.
7. El Healthy
Corre o monta en bicicleta. Por supuesto ni fuma ni bebe. Se mantiene en su peso y bebe dos litros de agua al día. No cuentes con este amigo para que te acompañe en tus correrías nocturnas, su punto fuerte es un estilo de vida sano. Al healthy hay que procurar no perderle de vista: una mañana te levantarás y mirando tu tripa, tu piel apagada y tu pelo sin brillo decidirás que ya es hora de empezar a cuidarte. Y ahí estará tu bien dispuesto amigo healthy, esperándote a la puerta de tu casa con la bici a al ralentí.
¿Qué clase de amigo añadirías tú?