A veces hay que parar un momento y hacerse un hueco y notar el propio hueco
A veces es preciso dejar que la belleza nos atraviese y recordar el silencio
A veces es bueno recordar el valor del propio hueco y apreciar que es ahí donde la belleza nos conmueve
A veces nos conviene parar y recordar que somos en el hueco, y en ningún otro lugar
Ramón Ballester