Adelgazar por obra y gracia del Espíritu Santo

Mmm, eso es lo que quisiéramos todas. Acostarnos y levantarnos con 100 libras menos. Sí, muchas veces me he amargado la vida pensando por qué Dios no me toma como ejemplo para demostrarle al mundo que EL sí existe y hace un milagro conmigo. No, no dejarme embarazada por obra y gracia del Espíritu Santo (ya que mi madre no se tragaría el milagro), pero dejarme flaca por obra y gracia del mismo.
Con ferviente devoción me acostaba convencida de que Dios me escucharía y me despertaría notablemente más flaca. Le prometía todo lo que me venía a la mente si tan solo me ponía flaca. Bueno, a través de los años he aprendido dos cosas:
- Primero: que Dios no se mete con la gordura, y,- Segundo: que adelgazar de la noche a la mañana (o en una semana) no es posible.
Un ejemplo vivo es Jennette Fulda. Esta chica en noviembre de 2004 pesaba 372 libras. Se puso a dieta y para junio de 2007 pesaba 180.
Pero miren que pasaron unos 3 años para ir de la foto en la izquierda a la foto de la derecha.
Claro, en tres años se ve el progreso de adelgazamiento, pero, ¿qué tal una semana, un mes? Sí, es posible ver los resultados de una dieta en un mes pero estos son mas notorios cuando las libras a perder no son muchas. Por ejemplo, en el caso de Jennette, de noviembre de 2004 a abril de 2005 rebajó 52 libras pero sin ven las fotos en su blog, el cambio a penas sí se nota. En su blog, pastaqueen.com pueden ver todas las fotos desde el primer día de la dieta hasta que se puso como quiso.
Espero que las fotos sirvan de inspiración para no desanimarnos a adelgazar.
Una amiga me envió un email preguntando que mas o menos en cuanto tiempo podría rebajar 20 kilos. La respuesta es: No lo se. Todo de pende de tu metabolismo. No todas las personas adelgazan igual. Por ejemplo, mi mamá en una semana se puede poner seca como esqueleto, yo no.
Lo importante no es saber cuanto tiempo tardaras en adelgazar... bueno, si nos importa porque uno quiere resultados 'ya'. Mejor digo que lo que debemos hacer es concentrarnos en nuestro propósito de adelgazar y no desanimarnos. ¿Qué ha pasado un mes y no te ves como Thalía? Sigue ahí, que poco a poco los resultados ya se verán. Si no, pregúntale a Jennette.