Al pan pan y al vino vino

Hoy podría decir algo así como "pa que te metes Manolete". Como recordareís hace un tiempo fui a un taller de cocina organizado por el Lidl, donde me lo pase como los indios y sino mirar el vídeo. Pues la historia tenía segunda parte, nos tocaba testear alguno de los electrodomésticos de su gama SilverCrest. Hace unos días llego nuestra nueva mascota "Paneitor" o lo que es lo mismo la archiconocida panificadora del LIDL. Sí hombre, esa por la que la gente hace cola a las 9:00 en la puerta del Lidl 😉

Hace una semana llegó el mensajero con una caja de unas dimensiones considerables, neskatilla entró en hiperventilación, yo creo que estaba convencida que eso estaba lleno de cosas para ellas. Cuando lo abrimos, me miró con cara de ahí dentro no me irás a meter a mí no?? Dicho esto me empollé el libro de instrucciones, o lo intenté, en este santo país las instrucciones de los electrodomésticos son muy regulones. A parte de eso tuve el apoyo extra del libro de recetas que lo acompaña y decidí lanzarme a la aventura, sin arnés ni paracaídas.

Mi reto ha sido hacer un pan rústico de mascarpone con tomate seco y orégano. Resultado: hay que mejorar morena. Para ser la primera vez no me quejo, es más, en estas cosas es cosa de ensayo-error. Ya sé cuando hay que sacar las palas de amasar o incluso no sacarlas, ya sé que todo lo extra que se quiera poner tipo queso etc., es mejor batirlo antes y sobre todo, ya sé que soy tecnolerda mayor y que me tengo que hacer con el programa de "paneitor". Con esto me refiero que no es coser y cantar, tampoco hay que hacer un máster pero está claro que la primera vez requiere su tiempo de trastear, de estar inquieta de si aquello esta chutando bien o no y sobre todo de saber que no vas a intoxicar a media familia.

Si no fuera porque tengo una cocina de Pin y Pon y el aparato ocupa lo suyo tengo claro que sería una nueva mascota en mi cocina. La idea de poder hasta programar el pan y levantarte con pan recién hecho en casa, de las harinas que quieras, porque tienes miles de opciones incluida la de sin gluten es toda una tentación saludable. Por no decir que a mí hijo le ha quedado claro que también se pueden hacer bizcochos largos, como ha dicho él, o masa de pizza e incluso masa de pasta casera. Y simplemente siguiendo unos pasos sencillos la máquina lo hace casi todo. Nuestro siguiente reto va ser la mermelada, que espero que me salga de rechupete. Mientras tanto estamos inquietos por la visita de la abuela que está como loca por ver el nuevo aparato y nos tememos que se quiera apropiar de él.

Para hacer pan me he dado cuenta que hay mil opciones, está claro que los más elaborados o combinaciones rarunas como la mía conllevan un poco de preparación, pero deciros que sino en el mismo Lidl venden una harina que ya trae todo, a la que sólo hay que añadir el agua y en 3 horas podéis tener un pan de 750 gramos que dura tres días y que es de lo más casero.

Por si alguien se anima estos eran los ingredientes de mi pan :

Y lo más importante de la receta, amor, incertidumbre, paciencia, ilusión y atracón final. En casa el padre y la niña se lo han comido con gusto, el monillo me ha dicho que ya me puedo currar otro sin tropezones y que quiere mermelada. En fin señores, nunca llueve a gusto de todos. Espero que es sirva mi experiencia.

*Las fotos de este post son de mi propiedad