Aldo Chaparro: 'Pure Beauty'

Hoy quiero recomendaros al artista peruano afincado en México Aldo Chaparro. Aldo Chaparro, nacido en Lima, Perú en 1965 y establecido en México desde finales de los ochenta es también editor y director de arte. Su obra se encuentra en el límite entre el funcionalismo puro y el arte. Chaparro fundamenta su obra bajo la influencia de la música popular, la necesidad de incorporar otras disciplinas a su arte y el concepto de memoria de Bergson. A través de diversos medios reúne referencias del pasado presente y futuro además del mundo mediático en un presente que coexiste simultáneamente.

“Siempre me ha preocupado la inasequibilidad del arte al público, hay que acercarse y se necesita como un decodificador para entender de que se habla. Yo escogí otras disciplinas más democráticas para poder conectarme con más gente”, explica el propio artista. En Chaparro también se observan las preocupaciones de un escultor tradicional, el volumen, la forma, los espacios negativos y positivos. El peruano ha depurado su trabajo a lo más elemental, desprendiéndose de toda herramienta o accesorio y enfrentándose física y directamente al material para crear maravillosas esculturas.

En pocas palabras, el proceso de creación de las piezas escultóricas, hechas en acero inoxidable, se asimila a la acción de  “agarrar un papel y arrugarlo,  toma forma, es una acción física muy inmediata, es el acto básico. Las doblo con el cuerpo, con la rodilla, la cabeza, les salto encima, las pateo, son el documento de la acción, conceptualizar el gesto escultórico que es enfrentar el material, hombre contra materia, son documentos de esa acción”. Este proceso de depuración tan conceptual, lo acompaña por ingeniosos textos que homenajean a muchas de sus musas e inspiradores, entre ellos Richard Prince o John Baldessari de quien toma una de sus frases más conocidas “PURE BEAUTY”.