Alegría y Enemigos De La Alegría | Vida y Salud

Alegría y Enemigos De La Alegría | Vida y Salud

La alegría de vivir:
En nuestros tiempos de  hombres de paz, tenemos un montón de bellas conquistas espirituales, así enriquecemos nuestra mente y corazón, daremos a los demás motivos para sacar el oro de la esperanza, es decir, gozar de nuestras riquezas  y paz.

Cultivemos la alegría y la sonrisa :
Cuando en la mañana, abrimos nuestros ojos, es una prueba existente que hay una fuerza inmensa, poderosa que nos envuelve al instante, las cosas nos rodean, extendiendo una sonrisa  ayudemos a la vida que nos proporcione las oportunidades felices que deseamos .
Nos dirigimos al mundo un pensamiento bueno. Para que nuestro amanecer  sea más placentero armónico, equilibrado, cultivando la alegría en esta tierra. Comencemos a ser feliz en este viaje en este triste planeta que nos brinda la vida.

La felicidad es salud:
El cuerpo y el alma pueden curarse con los remedios divinos y espirituales para esta medicina que nos conduce a la felicidad. 
Hay las lecciones de la vida, mostrando que podemos ser feliz, los remedios naturales  nos ayudan a conquistar una sonrisa.

Los enemigos de la alegría :
Se disfrazan ser infelices porque quieren que los demás lo sean, pero siempre nos conduce  al camino de la felicidad, nadie esta destinado a ser infeliz, ni  física, ni moralmente, por eso vivimos portadores de mensajes tristes, pero podemos modificarlo.
De cada veinte pacientes del sistema nervioso, por lo menos 100 se halla en este estado por haberse dejado vencer por pensamientos que producen  irritación y desanimo.
Estas demostrando que los pensamientos de tristeza llevan a los hombres muy de prisa a su ruina moral y física.
Los pesimistas son enfermos mentales.  Se forman el peor de los ambientes;  y lo que es mas grave, es permanecer en este estado de atmosfera siniestra.  
Valla alguien a decir que esta cultivando pensamientos equivocados. Que necesitan pensar  y obrar en forma contraria.
El mal humor es el objeto predilecto de los pesimistas.  
Huyen de los espectáculos alegres, de los ambientes animados, y prefieren meterse en medio de los fantasmas y melancolías.