Alejandro ¿al sur del cielo?

Dra Beatriz Moreno Masó*
La Galería de Arte Wifredo Lam de Marianao asumió el reto de exponer la primera muestra personal del joven valor de la plástica Alejandro Cordobés. Esta exposición titulada “Al Sur del Cielo” recoge una serie de piezas de cerámica realizada por el autor en los últimos años en los talleres de la Facultad de Artes Plásticas del ISA.
El autor es egresado de la Escuela de San Alejandro y posteriormente de la Universidad de las Artes. Actualmente ejerce como profesor de la asignatura “Dibujo” la cual se imparte a los estudiantes del perfil de Conservación y Restauración de Bienes Muebles de la misma facultad de la que egresó como Licenciado en Artes Plásticas.
Siendo egresado de Pintura, Alejandro evoluciona hacia la Cerámica, incluso antes de licenciarse. Esto fue debido a que debía cursar un Taller Opcional dentro del currículo de la carrera y en medio de las dificultades económicas, no todos los talleres que se impartían contaban con los materiales. Sin embargo, el taller de cerámica si tenía las posibilidades de atender alumnos, y allí fue donde se quedó prendido de este material tan noble que es el barro. Y además, tuvo la posibilidad de contar con la asesoría del Maestro Carlos Alberto XXXX.
Alejandro había participado en numerosas muestras colectivas, pero ésta es su primera experiencia personal. Para el ha significado mucho esfuerzo, en medio del trabajo como docente novel y las dificultades que ello implica, llevar paralelamente un trabajo como creador. Y es que Alejandro, que no es perfecto, si hay una palabra que lo caracteriza es la palabra tenacidad. A veces podría decirse tozudez, pero vamos a dejarlo en tenacidad.
Es muy trabajador y responsable, tanto como creador como en el aula. Puede ser que sólo él entienda lo que está haciendo allí en el taller, pero el seguirá haciéndolo. Y los estudiantes, cuando no adelantan lo que él considera que deben adelantar, no los dejará tranquilos, hasta lograr su objetivo. Porque Alejandro trabaja todos los días en la Facultad, llegando a primera hora y es de los últimos en irse y entiende que así es como debe hacerse.

La categorización de este joven para pasar a ocupar un puesto como docente en la categoría de instructor, corrió a cargo de una servidora y del Dr. Orlando Tajonera, el eminente profesor de Estética, ya fallecido. Para aclarar la situación, debo informarle al lector que mi profesión es la Física y que a la sazón, ocupaba el cargo de jefe del Departamento de Conservación y Restauración de Bienes Muebles.
Alejandro se apareció con el libro “Der Nacht Menn”, que es la biblia de los maestros de Dibujo. Y Alejandro empezó a hablar señalando figuras del libro y dando sus criterios al respecto. El profesor Tajonera lo miraba sonriente, y yo personalmente que no entiendo del tema, me dediqué a buscar orden y coherencia en su disertación. Al final, cuando, Alejandro se retiró para nosotros deliberar, el Dr. Tajonera me dijo: “Puede dar clases.”
Para mi eso fue suficien