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Algunas razones por las que Kanté es un futbolista diferente

Publicado el 30 enero 2019 por Colgadosporelfutbol

N’golo Kanté es un futbolista diferente por muchas razones. Y no solamente deportivas sino también por su personalidad  y forma de ser fuera del terreno de juego. Un chico que llegó a lo más alto del fútbol desde la miseria más absoluta pero que lejos de volverse loco y convertirse en un divo, conserva su humildad y una calidad humana casi mayor que la que tiene sobre el campo, que ya es decir. Éstas son algunas razones por las que Kanté es un futbolista diferente

Con 7 años recogía chatarra por París para ayudar a su familia 

Con solo 7 años N`golo Kanté lejos de estar en el colegio, tenía que recoger basura y chatarra por las afueras de la agitada París para poder ayudar a su familia a comer. 

Huye de los lujos y los coches de alta gama

Kanté gana alrededor de medio millón de euros al mes según fuentes oficiales. Sin embargo, lejos de llevar ropas caras, relojes y joyas de lujo y el típico cochazo del futbolista promedio, el centrocampista francés viste de manera normal y lleva un Mini Cooper con el que por cierto tuvo un leve accidente  con él en Londres y mientras se resolvía, él atendía amablemente a los hinchas que lo veían y se acercaban. 

Amigo de sus amigos, genial persona

Cuando Emiliano Sala desapareció y la policía del Canal de la Mancha decidió suspender la búsqueda de manera definitiva, Kanté se ofreció a financiar el rastreo del avión donde desapareció el que fuera su compañero en el Caen en la temporada 2014/15.

Tan tímido que le dio vergüenza pedir la Copa del Mundo para hacerse una foto

Fue pieza clave en la Francia campeona del Mundo en Rusia 2018, aún así, su carácter tímido y humilde hizo que le diera vergüenza pedir la Copa a uno de sus compañeros para hacerse una foto. Fue su compañero, N’Zonzi quien se percató del tema y se la consiguió. 

Kanté perdió un tren y acaba cenando y jugando al FIFA en casa de unos desconocidos

Tras un partido de la Premier, tenía que coger un tren Eurostar con destino a París pero el futbolista francés lo perdió. Unos jóvenes, al reconocerlo,  se acercaron a pedirle unas fotos y unas firmas. Hasta ahí todo normal, hasta que el mediocentro acabó yéndose con sus fans a casa de uno de ellos para cenar y echarse unos FIFA en la consola. Sin duda, Kanté es un futbolista diferente


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