Análisis de los Oscars 2011: Mejor Actor

An-an-and the win-winner i-is...

Esperemos que Colin Firth no tartamudee al recoger previsiblemente la estatuilla como Mejor Actor, su interpretación en El Discurso del Rey ha calado hondo en los festivales internacionales, la crítica y el público. De acuerdo, cuenta con el beneplácito general, pero tenemos un par de pequeñas quejas para los académicos, no se han portado nada bien con el bueno de Leo. DiCaprio ha sido uno de los grandes ausentes de estas nominaciones y las pasadas, dicho sea de paso. Lo cierto es que el chico se merece de una vez por todas un reconocimiento y la oportunidad le había venido de Shutter Island. Pero no desesperemos, que tiene buenos proyectos por delante y es posible que de alguno saque tajada.
Segunda - o tercera y cuarta- llamada de atención. ¿Qué ha pasado con Ryan Gosling? Ya dijimos en el reportaje sobre los 10 ausentes en los Oscar 2011 que mientras Michelle Williams ha logrado una nominación, el otro protagonista de Blue Valantine sólo se ha comido lo de cierta polémica escena. Y no sólo se han olvidado de la gran actuación del chico, si nos fijamos en las nominaciones a Mejor Actor Secundario también se han dejado por el camino a Pierce Brosnan por El Escritor o Andrew Garfield por La Red Social que, incluso, supera a Eisenberg. Una pena.
En fin, los detalles de los nominados tras el salto, que nos ponemos malos si seguimos.
Javier Bardem. Biutiful

Nuestro actor más internacional resulta ser en Biutiful la pieza clave de la película. Sin él interpretando al desgraciado ex-toxicómano Uxbal, la cinta tendría menos valor que un DVD pirata con escenas extra de The Tourist, que no lo queremos ni regalado. Sin embargo, tiene en su contra eso mismo, que la película de Iñárritu no es tan buena. Que vale, que se premia la actuación del actor, pero es que es inevitable no alienarse del contexto fílmico y el argumento en general, van unidos, si no, que se lo digan a Jesse Eisenberg, que haciendo el mismo papel en otra película no estaría ahí ni aunque su familia entera sea el propio gremio de académicos.
En 2007, Bardem se llevó el Oscar a Mejor Actor de Reparto por No es País para Viejos, por lo que lo tuvo relativamente fácil en una categoría que se presupone de menor prestigio, sin desmerecerla para nada, pero no vamos a ser hipócritas y negar que un calvito por un papel protagonista otorga mayor standing. El caso es que con la competencia que tiene y teniendo en cuenta que la Academia barrería para casita de no ser por la poderosa presencia de Colin Firth, Bardem lo tiene crudo, muy crudo. Esta vez, no es Oscar para pendejos, que diría Iñárritu.
Jeff Bridges. Valor de Ley

Sería bonito que repitiera la misma suerte que John Wayne con la Valor de Ley originaria, pero no creemos que vaya a suceder. Aunque Jeff está espectacular metido en las botas del desagradable y sucio marshall Rooster Cogburn, la verborrea interrumpida del educado Jorge VI de Colin Firth no parece que vaya a tener piedad alguna con el viejo cowboy, además de que con Crazy Heart el pasado año ya tuvo bastante.
De todas maneras, que el Rey no cante victoria, porque nunca se sabe y si hay algún rival fuerte en esta categoría, ese es el Señor Bridges.
Jesse Eisenberg. La Red Social

Bah, esa es la opinión de una servidora, un simple y sencillo bah. La actuación de el sosito de Eisenberg no me parece tan elogiable, y eso que el chico me cae bien, pero no veo que su trabajo sea la leche. Como hemos mencionado en más de una ocasión, su compañero de reparto, Andrew Garfield, le supera en todos los aspectos. Este es el claro ejemplo de actor que está nominado porque la película se sale de lo buena que es, o eso dicen (aunque siempre defenderé a la del denostado Nolan por encima de ésta), y ello lo demuestra que el film se ha llevado más premios internacionales por otros aspectos que por su actor principal.
Dudo mucho que Eisenberg se haga con la estatuilla, más teniendo en cuenta a Firth, Bridges o incluso James Franco, que se lo comen por todos los lados. Jesse, eres joven, tienes mucho que aprender aún, ya llegará tu momento.
James Franco. 127 Horas

Este actor que empezó siendo el discretito hijo del malvado Duende se ha convertido en la estrella de moda gracias al papelón de tontaco que se curra en la cinta de Danny Boyle, quien le ha echado una manita, y nunca mejor dicho, en su carrera hacia la fama. Él solito lleva el peso de la cinta con su jeta ante la cámara las dos horitas de película, así que como para no hacerlo bien y no destacar, digamos que más remedio, no tenia.
Sin embargo y para ser 'francos', el chico lo tiene muy difícil y parece que tendrá que demostrar más si quiere hacerse con este galardón algún día, no será por falta de proyectos. De momento, ante los veteranos de la categoría, poca cosa que hacer tiene.
Colin Firth. El Discurso del Rey

El gran favorito de este año. Sin duda, sus tropecientos premios acumulados hasta ahora le avalan y no es para menos, el amigo Firth se bate una interpretación magistral. Si Jorge VI levantara la cabeza, se cascaría un trabalenguas para elogiar el trabajo del británico, que junto a Geoffrey Rush forman la pareja perfecta de un film cuasi-perfecto. A mí, que le den el Oscar a Colin, me vale, que ya se quedó a las puertas con un Hombre Soltero y esta tiene que ser, seguramente, la definitiva.
Y no sólo en actores parece que El discurso del Rey compita con la rompedora La Red Social, sino que en el resto de categorías también va a ser la rival más dura de la de Fincher y le ha ido comiendo terreno en tiempo récord por todos los lados. En este apartado, creemos que ya le ha ganado, pero no en todo se puede 'reinar'.
Nuestra apuesta --> Colin Firth.