Revista Atletismo

Análisis Vivobarefoot Ultra III

Por Juan Andrés Camacho Fernández @CorredorErrante
Análisis Vivobarefoot Ultra III

Características:Grosor suela: 7 milímetrosDrop: 0 milímetrosPeso: 210 gramosComprada el: 15 de marzo de 2018


Primeras impresiones tras 71 kilómetros:

Tras algo más de dos años calzando únicamente huaraches decidí probar algo diferente por dos razones.

La primera porque ya desde el Ultra Trail Tabenas Desert tenía curiosidad por probar algo de Vivobarefoot (mi compañero Matt Imling tenía varios pares suyos y estaba muy contento) y me lo han recomendado también a lo largo de los años Víctor Hidalgo, de la Clínica del Pie de la Malagueta y Antonio, de Zapatillas Minimalistas, entre otors

Y la segunda razón es por una herida recurrente que se me forma en la base del pie derecho, que recientemente se me abrió y ha estado dándome la lata hace varias semanas.

Me suele dar problemas sobre todo a la hora de hacer largas bajadas con fuertes pendientes, especialmente en mojado, por lo que puedo llevarlas también en la mochila para cuando hago sesiones de bajada desde el repetidor.

Análisis Vivobarefoot Ultra III

Bonita presentación

Mis primeras sensaciones andando con ellas fueron raras, ya que se ve como un calzado cerrado, pero las sensaciones son realmente similares a ir descalzo.

Es algo similar a calzar los Mei, pero aun más marcado, parece que vas totalmente pegado al suelo.

Quiero recordar que he comprado yo las zapatillas y como siempre, nadie me paga para que hable bien de ellas; mi opinión será 100% sincera, como es habitual.

Análisis Vivobarefoot Ultra III

Al quitarle los cartones se quedaron "deformadas", habrá que amoldarlas a los pies

En los primeros kilómetros con ellas me tropecé varias veces, al principio no te das cuenta de lo cerca del suelo que vas y simplemente el que una loseta esté levemente más levantada que otra puede hacer que tropieces si no vas atento.

Durante mi primera sesión con ellas hubo un momento dado en el que pasé por una zona de orilla de la playa y al llegar a casa me di cuenta de que había granitos dentro.

Esto siempre es un engorro, pero con las Ultra III simplemente las metes bajo el grifo para enjuagarlas y listo.

Corrí con calcetines pero mi idea es hacerlo descalzo una vez las tenga amoldadas; esa facilidad para lavarlas ayudará a evitar que generen mal olor, como acababa pasándome con las Fivefingers Bikila LS.

Curiosamente tuve agujetas en las plantas de los pies tras esa primera sesión con las Ultra III.

Estoy acostumbrado a correr descalzo, pero lo achaco al ritmo de la vuelta, bastante más elevado del que suelo llevar al correr descalzo.

Al día siguiente se me ocurrió la feliz idea de llevármelas a una tirada larga directamente (soy un lumbreras, lo sé), sin echar ningún par de huaraches en la mochila.

La primera hora y media me fue fenomenal, pero gusto al dar la vuelta para emprender el camino de vuelta empecé a notar una molestia en la zona exterior del pie izquierdo, que iba a más con cada apoyo.

Uno de los motivos por los que empecé a correr con huaraches es que cuando se me hinchan los pies con las horas de carrera acababa teniendo molestias, rozaduras, ampollas...

No creo que me pase con las Ultra III una vez las tenga hechas al pie, pero estaba claro que tras solo una tirada no era el caso.

Me quité los calcetines y la cosa mejoró unos kms, pero empezaron a salirme rozaduras en el talón izquierdo, pulgar derecho y meñique izquierdo, por lo que me descalcé durante varios kilómetros.

En una zona con bastantes cristales rotos por el suelo, seguramente debido a algún accidente de tráfico, me calcé de nuevo las Ultra III, colocando los calcetines entre la zapatilla y el pie por las zonas de roces y pude acabar corriendo a muy buen ritmo sin molestias.

Tras varias salidas he ido controlando el ajuste (en las 2 primeras sesiones las llevaba apretadas a tope) y me he dado cuenta de que lo ideal, para mis pies al menos, es tener la lengüeta lo más abierta posible, apretando tan solo un poco al final y al principio para que no aumente la presión en el empeine cuando el pie comience a hincharse con el paso de los kilómetros.

Sigo prefiriendo correr con huaraches a correr con las Vivobarefoot, pero en circunstancias en las que no debo usar huaraches, como en los entrenamientos de Crossfit, son una muy buena elección, por su ligereza, su mínimo drop y su comodidad.

Análisis Vivobarefoot Ultra III

210 gramos, de lo más ligero en cuanto a calzado para correr con forma de zapatilla que he probado

Por el momento las estoy empleando para que los pies "descansen" de la tensión de las correas de los huaraches tras las tiradas largas y en las sesiones con fuertes bajadas y me está yendo bien con ellas, por lo que no creo que tarde muchos meses en poder profundizar en este análisis.

Os presento su estado actual en comparación con el que tenían nada más salir del paquete:

Análisis Vivobarefoot Ultra III

Antes...

Análisis Vivobarefoot Ultra III

Después

Análisis Vivobarefoot Ultra III

Antes...


Análisis Vivobarefoot Ultra III

Después


Análisis Vivobarefoot Ultra III

La suela, con un poco de desgaste, habrá que ver si es solo superficial o empeora con los kms al mismo ritmo

Una vez vista la evolución llegando al primer centenar de kilómetros, os dejo con el resumen de mis primeras impresiones con ellas.

Lo peor:


-Para ser una zapatilla pensaba que se iban a amoldar con mayor facilidad, pero no, requieren de una "doma" similar a la de los huaraches; en mi caso ya están mucho más moldeadas, pero aun les quedan un poco.

-Por el momento no puedo usarlas sin calcetines, ya que me siguen haciendo rozaduras... habrá que ver si una vez se adapten por completo al pie puedo correr sin ellos.

-En la capa superficial de la suela se aprecia un ligero desgaste; algo similar me pasó con la suela de las Bikila LS en los primeros kilómetros y luego se mantuvieron estables varias centenas de kilómetros, espero que sea similar, ya que la durabilidad es un punto clave del calzado desde mi punto de vista.

Lo mejor:
-Correr con ellas es una experiencia realmente parecida a ir descalzo, diferente a correr con huaraches, pero hay que probarlo también, es difícil de explicar.
-Son ligeras, totalmente flexibles y muy cómodas, ideales para las situaciones en las que no puedes/debes calzar huaraches.
-La transpiración es muy buena y puedes usarlas sin problemas los días de lluvia o para cruzar arroyos, ya que se secan en seguida y si entran piedras con tan solo quitarlas y dar una sacudida salen todas al momento.

Os mantendré al tanto conforme haga más kilómetros.

¡Un abrazo!


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