Revista Cultura y Ocio

Ángel Martín y Ricardo Castella, cuando el humor viste de negro

Publicado el 22 abril 2012 por Ruta42 @ruta42
Ángel Martín y Ricardo Castella, cuando el humor viste de negro

Imágenes cedidas por el gabinete de prensa del Teatro Zorrilla

Sábado por la tarde, cuando se estaba jugando el llamado partido clásico, pero a la vez el Teatro Zorrilla estaba lleno y es que parece que la risa pudo contra el fútbol.

Se abre el escenario y aparecen dos hombres vestidos de negro, uno se presenta diciendo que él era el “que estaba en el programa de Patricia Conde” y el segundo con “yo soy el otro del cartel”. De esta manera Ángel Martín y Ricardo Castella lograron que desde el primer minuto las carcajadas del público, que no pararon en ningún momento del show.

¿Y qué cuentan? Muy sencillo, nos presentan el que será el capítulo piloto para una nueva serie televisiva. Todo empezará cuando el conocido presentador no renueve para SLQH y decida cambiar el rumbo de su vida, momento en el que se cruzará con Ricardo y decidirán unir su camino.

No es fácil luchar por lo que quieres, y nunca es tarde para hacerlo, aunque te encontrarás obtáculos, gente de tu pasado y por supuesto las cosas nunca saldrán según te esperas y cuando te descuidas un enano aparece en tu vida, y no, no me refiero a Ángel, más bien al pequeño muñeco de goma espuma que es el duende mágico de los sueños, un personaje que dará mucho juego a lo largo de la representación.

Ángel Martín y Ricardo Castella, cuando el humor viste de negro

Pero, ¿dos horas ellos solos en el escenario contando esto? Sí, y la verdad que se hace corto, pero también por el hecho de introducir canciones (que ellos mismos han escrito y tocan) en el número, riéndose en el proceso de bastantes clichés y tópicos del mundo de la televisión y, esto es así, del que cada día nos toca vivir.

Es cierto que no hay fondo, decorado o algo que nos ayude a situarnos, que aporte ese toque de realidad que siempre viene bien pero no hace falta, esto es humor inteligente (dicen) y con ciertos toques del absurdo, ya se encargará el propio espectador de rellenar los huecos mientras escucha las geniales sentencias del par de protagonistas.

A veces, en ciertos actos, vas con dudas de si estará a la altura de lo esperado y no es así, aquí de hecho es peor ya que las expectativas estaban altas y por tanto el juicio también iba a ser mayor, pero Martín y Castella desbordaron la taza, rompieron la puerta y solo faltó que invitaran al público a leche con galletas.

Ángel Martín y Ricardo Castella, cuando el humor viste de negro

Doc Pastor

Hace tiempo inicié Ruta 42 (@ruta42 en Twitter), una gaceta para la que dedico la mayor parte de mis escritos y fotografías. También colaboro actualmente con el periódico AQUÍ en Valladolid y en la revista LaRAÑA de Sevilla. Cuando no estoy por aquí es que estoy jugando con mi perrito (se llama Loki).

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