Año cero después de Pat Rice

44 años. Ese es el legado que deja en el club gunner este norirlandés, ex jugador, ex manager y ex sombra permanente de Arsène Wenger.Los más viejos del lugar verán este año a un Arsenal raro, diferente… Y no será por las caras nuevas, el cambio de camiseta que en esta sociedad consumista es anual, ni tan siquiera por el cambio demasiado continuo del escudo. Será porque faltará alguien, faltará Pat Rice. 44 años en el club vistiendo primero la zamarra de jugador y más tarde el chándal del cuerpo técnico semana tras semana. Ésta será la diferencia.

Fuente: Acultureleftfoot.com

Este norirlandés nacido en el año 1949 en Belfast, viajó a Londres a los 10 años de edad, y desde entonces su corazón se hizo cañonero. Se unió al club de joven, a los 17, edad en la que en el fútbol actual muchos ya son considerados estrellas. Dos años más tarde llegó al equipo de reservas y la alternativa se dio en el 67, ante el Burnley con victoria de los gunners por 2-1.
Pero la carrera no fue tan meteórica como en un principio se auguraba. Pat defendía la banda derecha del Arsenal, pero su puesto ya tenía dueño. Sin embargo, a base de versatilidad, tenacidad y voluntad para ayudar al club a alcanzar el éxito, consiguió hacerse con el lateral derecho en la histórica temporada 70-71, la del primer doblete gunner.
Titular indiscutible durante la década de los 70, alcanzó la capitanía en el año 77 como premio a su labor y lealtad al club. Brazalete que dos años después le brindaría la oportunidad de levantar la copa de la FA en la final ganada al Manchester United. En la temporada siguiente entró en la historia del club al convertirse en uno de los tres jugadores del Arsenal que ha disputado cinco finales de FA, honor que comparte con otros dos grandes del fútbol como fueron David Seaman y Ray Parlour.
Pero la hora de colgar las botas se acercaba y con ello parecía que también su idílica relación con el equipo del norte de Londres. Tras 528 partidos Pat Rice abandonaba el club con 31 años y ponía rumbo a Watford. Allí, una vez más, se le recordará siempre por formar parte del equipo que consiguió el ascenso a la First Division, hecho histórico en el humilde club de los Hornets. 137 partidos después, en el año 1984, decidió poner fin a su carrera como futbolista profesional, llevando a sus espaldas, también, 49 partidos como internacional.
Al otro lado de la línea de cal

Fuente: People.co.uk. RicePic.

Pocos meses después, con el inicio de la siguiente temporada a la de su retirada decidió colocarse en el lado de la línea de banda donde no se disputa el balón. Y, por supuesto, volvió a su casa. Dirigió durante doce años al equipo juvenil del Arsenal con el que conquistó dos FA Cup de la categoría.

Y entonces llegó la hora de dar el salto al primer equipo, aventura que duraría poco más de dos semanas. Su carismática imagen, siempre escondiendo la mirada detrás de sus gafas, defendió al club de Highbury durante 4 partidos tras la destitución en el mes de septiembre de Stewart Houston. La corta trayectoria dirigiendo al primer equipo podría considerarse excelente ya que consiguió la victoria en tres de los cuatro partidos, pero a pesar de ello, los dirigentes del club decidieron fichar al Boss.
Y desde entonces hasta el pasado mes de mayo han pasado 16 años en los que estuvo al lado, siempre inseparable, como sombra permanente de Arsène Wenger. Años en los que vivió y fue parte importantísima de la gloriosa época de los 90 y del nuevo siglo con los dobletes de las temporadas 97-98 y 01-02.
Y si el repaso de su trayectoria a lo largo de 44 años en el club no es suficiente para mostrar la importancia de este norirlandés solo hay que echar un vistazo a las leyendas vivas del club que quisieron dedicarle una despedida; Bob Wilson, Tony Adams, David Seaman, Dennis Bergkamp, Thierry Henry y el propio Arsène Wenger que quiso despedirse de él con gratitud. “Pat es una leyenda del Arsenal, donde pasó la mayor parte de su vida. Fue extraordinario conmigo durante 16 años. Él me enseñó mucho acerca de este gran club. Yo siempre le estaré agradecido.”
Pat Rice bien merece este artículo porque en el fútbol de hoy en día en el que la lealtad a unos colores brilla por su ausencia, 44 años han sido un honor. La historia del Arsenal jamás podrá ser contada sin nombrar a Pat Rice.

Usune Llorente

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