Arranca la temporada grande 2010-2011

El Payo demostrando torería y pundonor.

Así, calmado y satisfecho disfrutó de la emocionantes tandas del regalito del Payo.

Éste que sigue sin entender que los toros son negocio, hasta para él. ¿Alguien le podría decir que podríamos comprar boletos y llenar la plaza si se deja de toro-perros?

Con el gusto de volver a sus pantallas, Pasifae y los toros retoma su lugar en la Fiesta para traerles la seudocrónica de las corridas que conforman el serial menos serio pero sí, por supuesto que sí, más rimbombante de la República Mexicana. 
A las 4:30pm, sabrá el sr. Herrerías por qué demonios hasta esa hora, se partió plaza sin un pétalo de flores o por lo menos una lona pigmentada que anunciara que hoy comenzó la Teporada. 
Caray deberíamos quejarnos hasta de eso, pero mejor al toro: 
Los primeros 4 toros tenían los cuartos traseros muy altos, tanto, que la cabeza la llevaron a la misma altura, no más no humillaron pero bueno, el quinto fue el toro más bizarro. De pinta indefinida por la multitud de capas mezcladas desproporcionadamente sobre su cuerpo, y un pelambre en el morrillo similiar al de los niños EMO vaya, que resultó de risa loca... cómo se lo permite la Plaza, cómo prefiere Ponce torear este sin tipo de animales que uno como el reserva que bien escogió el Payo... Ahhh sí porque el Cartel Inaugural lo conformaron: Eulalio López "El Zotoluco", Enrique Ponce y Octavio García "El Payo"... mmm.. qué les cuento... ahh sí que el toro perrodespeluzado que saltó a la arena vaya que fue rechiflado por una Plaza a 3/4, excelente entrada considerando la temporada pasada. Y es que el cartel estaba tentador porque se trata de toreros serios. 
El Zotoluco no tuvo suerte, los dos primeros toros un desastre... incluso escuchó en cada uno el desagradable aviso, pero en el "de regalo" ahí sacó todo su poderío, será que como no era de la misma ganadería dió un juego más interesante o por lo menos se le sacaron varias tandas de derechazos y una por naturales de no tan mal ver...???  Al final se le concedió una oreja, porque pues no mató tan mal, pero tampoco también, la estocada estuvo un tanto tendida. 

Sí, ya lo sabes ahora: Debiste regalar un toro querido Ponce.  

Ponce, Ponce, a mí la poncina se me hace un recurso sin creatividad que pone en riesgo las maneras tan finas de mi querido Ponce, porque yo lo respeto mucho, es un torero serio quien aunque falle con el acero, vaya, es un placer del tipo deleitoso para saborear el toreo con clase; una fina y vertical estampa que no me gusta cuando realiza esta especie de calentamiento atlético frente al toro. Yo a Ponce lo prefiero de pie frente al toro de la verdad, y es que este ganado no era tan feo como el sorullo que nos volcó a la risa y que para bien de la Fiesta fue devuelto a los corrales... cómo pueden darse ese tipo de lujos, no?... Por reglamento (el de la plaza México lo pueden encontrar en este su blog) antes de que comience el último tercio del 6° de la tarde, los espadas deben anunciar-pedir permiso para, al juez de plaza- que su toro de regalo, en serio es una regla. Ponce se rehusó porque supongo que a él las reservas le dan igual, o bien no estaba muy presto a que no es el rey, vaya!, que, aunque figura, debe obedecer las reglas. Y ante la presión del público no solicitó toro de regalo. 
El que sí lo hizo porque además le tocó el peor de los lotes, o más bien lo peor de lo peor... fue El Payo, quien sin dudar salió a sudar el terno en esta tarde. Sufrió un percance ante su toro de regalo, ahhh porque pues su lote estuvo de miedo, primero porque los 2 de regla fueron medrosos, sin chiste, encapsulados en no sé que droga que los hacía tan vulgares, por la nula transmisión ... muy mal su lote pero lo bueno fue escoger reserva, y que su gente sí lo supo escoger...
Un animalito hermoso, con trapió, y una bravura que se dejaba ver, altivo, fuerte, canalla... porque en un pequeño descuido, de tanto acercarsele, El Payo salió volando, cayendo con el cuello... en calidad de bulto fue a parar a la enfermería, no pudo ni levantarse. Tras una breve revisión el de Querétaro volvió a su fiera, que lo esperaba entero porque el puyazo fue insignificante y las banderillas tan sólo 4 porque los de pasamanería no tuvieron tanta suerte y es que el toro arremetía. Santa María de Jalpa fue la cuna de tan codicioso ejemplar.
Por final una certera estocada le abrió la puerta grande al Payo muy a pesar de la molestia del Juez... la afición insistió, aunque ciertamente la faena fue muy corta aunque de mucho valor, temeridad y chispas de arte bien aprovechadas dentro de la técnica del Payo. El cachetazo final estuvo enmarcado por la lluvia de cojines rojos que parecía se desdoblaban como en tormenta que al callar dejaron ver nubecillas blancas, de puros pañuelos. El torero no salió en hombros ni dio la vuelta al ruedo, su toro aunque noble, bravo y fiero, no logró apabullar al juez y salió sin mención alguna, mientras su matador tras el abrazo alguacilesco echó tras la camilla de la enfermería.
Las Puyas no causaron, al igual que las banderillas mayor revuelo, lástima. 
Espero sinceramente que la Plaza deje atrás los contratillos que nos enjaretan toros de risa como los de hoy de San José.