La semana pasada recibimos en casa la última novedad de Barilla, una pasta para intolerantes al gluten. Hasta ahora la marca de pasta italiana no contaba en su lineal con pasta "sin gluten", una asignatura pendiente en un mercado cada vez con más personas que no pueden tomar esta proteína, pero no quieren renunciar a los mejores sabores.
En casa nos encanta esta marca, tiene una textura perfecta una vez cocida, no se pega nada y siempre queda al dente, con consistencia, como en los mejores restaurantes italianos. La pasta es un alimento que seguro no falta en ningún hogar, por su versatilidad y multitud de combinaciones en la cocina gusta a grandes y a pequeños, además que contamos con un montón de variedades para elegir la que mejor se adapta a nuestra cocina y a nuestros gustos.
Siempre ha sido un alimento prohibido para celíacos y alérgicos o intolerantes al gluten, pero desde hace unos años no supone ningún problema para ellos encontrar variedades sin gluten en el supermercado. Sin embargo, para Barilla si supone una novedad, así que estamos encantados de probarla en casa para contaros qué tal ha resultado, y si existe diferencia con la original.
Las dos variedades que han lanzado "senza glutine" son los Penne Rigate y los Spaguetti N5, las más populares entre los consumidores. Ambos están realizados con harina de maiz y harina de arroz, de ahí ese tono amarillente y translúcido, característico de la pasta sin gluten. Yo he decidido hacer un plato con los Spaguetti que son siempre un triunfo en casa.
Para hacerlos de forma diferente, en esta ocasión el acompañamiento es con espárragos trigueros, langostinos y tofu, con una salsa de tomate y pimientos que le va fenomenal a cualquier clase de pasta.
Los ingredientes son muy sencillos (para dos personas): espárragos trigueros al gusto, unos 8-10 más o menos, unos 100 gramos de tofu en dados, una docena de langostinos y una buena fritada de pimientos y tomate frito para unir todos los ingredientes. Los Spaguetti para dos personas son unos 100-120 gramos, si os gustan mucho 125 gramos! 🙂
No es una receta vegetariana ni vegana aunque lleve tofu, porque los langostinos no encajan en su dieta pero a nosotros nos encanta el tofu, y su combinación con otros ingredientes como las verduras hace que esté buenísimo en cualquier plato, sobre todo, con la pasta, el arroz o cereales como el mijo, o el cous cous.
La elaboración es muy fácil, basta con sofreír los espárragos hasta que estén tiernos, después añadirles el tofu y cocinarlo por todos los lados hasta que esté dorado. Por otro lado, en una olla se calienta el tomate y la fritada (yo ya la tenía hecha, me gusta tener siempre en la despensa para ocasiones como ésta), se le añaden los langostinos para que se calienten, y los espárragos y tofu que teníamos reservados. A todo esto se le agregan los Spaguetti una voz cocidos, unas vueltas para mezclar todos los ingredientes, y a disfrutar de un plato sano y muy completo por su variedad de ingredientes.
Como ya he comentado antes, lo que más me gusta de esta pasta es como queda una vez cocida y cocinada, y en el caso de la variedad sin gluten no he notado ninguna diferencia con la original. El resultado sigue quedando al dente, firme, suelta, no se pega, y absorbe perfectamente todos los sabores de la salsa e ingredientes que le añadas.
¡Una pasta para disfrutar!
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