Revista Salud y Bienestar

Ataque cardíaco: un nuevo hallazgo puede cambiar la cara del tratamiento

Por Saludconsultas @SaludConsultas
  • Noticias de Ciencia
  • Biología / Bioquímica
  • Salud
  • Enfermedades del Corazón
Por Equipo de redacción Share Facebook Twitter Google+ WhatsApp

Los ataques cardíacos son emergencias médicas en las cuales el suministro de sangre al corazón se bloquea, generalmente por un coágulo de sangre. Un nuevo estudio realizado en Suecia ha hecho un descubrimiento intrigante que puede cambiar las pautas existentes sobre el tratamiento de los ataques cardíacos.

¿Ciertos anticuerpos juegan un papel en los ataques cardíacos?¿Ciertos anticuerpos juegan un papel en los ataques cardíacos?

Los anticuerpos, o inmunoglobulinas (Ig), son un tipo de proteína producida por las células plasmáticas (un tipo de célula sanguínea). El sistema inmunológico a menudo los coopta para combatir cuerpos extraños potencialmente dañinos.

Ahora, investigadores del Instituto Karolinska en Solna, Suecia, han descubierto que ciertos anticuerpos, una vez asociados con enfermedades reumáticas, también están presentes en grandes cantidades dentro de los cuerpos de personas que han sufrido un ataque cardíaco.

Estos son los anticuerpos antifosfolípidos (aPL), que son anticuerpos anormales que reaccionan a los tipos de tejido producidos por el propio cuerpo, como la cardiolipina (una lipoproteína) y la beta-2-glicoproteína-I (una proteína plasmática).

Los científicos señalan que los aPL suelen aparecer en el contexto de enfermedades reumáticas, como el lupus eritematoso sistémico o lupus.

La presencia de estos anticuerpos, continúan, puede aumentar el riesgo de coágulos sanguíneos en una persona. Esto ocurre en el síndrome antifosfolípido (APS, por sus siglas en inglés), una condición autoinmune en la que el cuerpo produce en exceso aPL.

Los anticuerpos están presentes en niveles altos

En el estudio reciente 1, cuyos hallazgos aparecen en Annals of Internal Medicine, los autores señalan que la aPL está claramente presente en los cuerpos de muchas personas que han sufrido ataques cardíacos y están libres de enfermedades autoinmunes.

También informan que hasta ahora no ha quedado claro qué tan comunes son los aPL en el caso de esas personas, porque los científicos han realizado estudios previos a una escala demasiado pequeña para proporcionar los datos apropiados.

Para el nuevo estudio, los investigadores trabajaron con 800 personas ingresadas como pacientes en 17 hospitales suecos después de haber experimentado un ataque al corazón por primera vez.

Para poder comparar los datos, los investigadores también reclutaron un número igual de participantes sanos para actuar como grupo de control.

Los investigadores analizaron muestras de sangre del primer grupo a los 6 y luego nuevamente a las 10 semanas después del ataque cardíaco. Buscaron tres tipos distintos de aPL: inmunoglobulina G (IgG), M (IgM) y A (IgA).

Cuando observaron los datos, los investigadores observaron que el 11 por ciento de los participantes que habían sufrido ataques cardíacos tenían aPL que reaccionaban tanto con la cardiolipina como con la beta-2-glicoproteína-I. Eso fue 10 veces más personas que en el grupo de control.

“Hace mucho que estoy convencido de que los anticuerpos son más comunes de lo que pensamos y ahora hemos podido analizar su presencia en un gran material para pacientes”, dice la autora del estudio, Prof. Elisabet Svenungsson.

‘Esto cambiaría las pautas vigentes’

“Fue una proporción sorprendentemente alta de pacientes y los niveles también fueron claramente altos”, explica el profesor Svenungsson.

Específicamente, los voluntarios tenían altos niveles de anticuerpos IgG, que se asocian más comúnmente con un mayor riesgo de coágulos de sangre.

Sin embargo, los investigadores admiten que solo recolectaron un conjunto de muestras de sangre, que pueden no reflejar con precisión los niveles de aPL a lo largo del tiempo y, en cambio, pueden ser una reacción única al ataque cardíaco.

Aún así, si sus niveles de aPL permanecen altos durante 3 meses, esto significaría que los participantes tienen APS, lo que los predispondría a coágulos de sangre.

“En cuyo caso deberían”, señala el Prof. Svenungsson, “según las recomendaciones actuales, se debe prescribir un tratamiento de por vida con la warfarina anticoagulante, que reduce el riesgo de nuevos coágulos sanguíneos”, concluyendo:

“Esto cambiaría las pautas vigentes para la investigación y el tratamiento de los ataques cardíacos”.


Referencias:

  1. ACP – Anticuerpos antifosfolípidos en pacientes con infarto de miocardio http://annals.org/aim/article-abstract/2709123/antiphospholipid-antibodies-patients-myocardial-infarction?doi=10.7326%2fM18-2130
  • Etiquetas
  • anticuerpos
  • ataques cardíacos
Share Facebook Twitter Google+ WhatsApp Artículo anterior¿Comer alimentos orgánicos protege contra el cáncer?Artículo siguiente¿Por qué probablemente tienes microplásticos en tu caca? Equipo de redacción

Volver a la Portada de Logo Paperblog