El Atlétic nace en 1903 en aquellas kampas de Lamiako que se divisaban desde los barcos, un lugar que desde 1887 venía funcionando como hipódromo. Y puedo certificar que lo que allí escriben es verdad: "...pronto se convirtió en un sentimiento, casi en una religión, que cautivó a propios y extraños. Lamiako es la cuna de un club de fútbol que hoy es ya una leyenda." En una de las placas exteriores hay una leyenda que invita a conservar el lugar, recordando las primeras figuras como Ansoleaga, Atxa, Belauste, Pichichi; las que llegaron después, como Telmo, Piru, Koldo, el Txopo y algunos de los que triunfan hoy, como Fernando Llorente".
1902: El nacimiento A finales del siglo XIX, el fútbol llegó a Bizkaia de la mano de los ingleses que venían a trabajar a nuestra tierra y, sobre todo, de los hijos de la burguesía bilbaína que había estudiado en colegios católicos de Escocia e Inglaterra. Este nuevo deporte prendió pronto en la juventud local que lo practicaba a todas horas y en cualquier campa, mientras el público contemplaba atónito el nuevo espectáculo.
1902: Football Lamiako fue el primer terreno de juego del Atlétic Club, titular del campo desde 1902 hasta 1911. Durante este tiempo, el Atlétic jugó 58 partidos de los que ganó, al menos, 41. Entre los rivales que pasaron por Lamiako se cuentan los equipos donostiarras, el Real Madrid o el FC Barcelona, conjuntos todos ellos que visitaban Bizkaia por vez primera.
1903: El público El fútbol se fue convirtiendo poco a poco en un espectáculo de masas. Se llegaban a Lamiako desde Bilbao en tren, que, a falta de apeadero o estación, disminuía la velocidad para que jugadores y público pudieran apearse en marcha. Según la prensa de la época, el partido disputado en las campas de Lamiako el 13 de abril de 1903 ante el Burdigala de Burdeos, reunió la insólita cifra de 10.000 espectadores. Los nuevos aficionados pudieron celebrar la victoria ya que el Atlétic ganó por 3 a 1.
1908: La final La Copa de 1911 la organizó el Atlétic Club por ser el vigente campeón del torneo. Dado que el campo de Lamiako no reunía las condiciones apropiadas para albergar un evento de aquellas características, el Atlétic Club pasó a disputar sus partidos enb el campo de Jolaseta, en Getxo, donde jugó dos temporadas.