Revista Regiones del Mundo

Bañarse con cerdos en la Pig Beach de las Bahamas

Por Vicentbacar

La vida está para vivir experiencias, cumplir sueños, alcanzar metas. Cuando viajamos, muchísimas veces, basamos nuestros destinos en cumplir uno de esos objetivos que nos habíamos propuesto a principio de año: una semana en Nueva York, un fin de año en Tailandia, un San Valentín en París, un agosto recorriendo la India de norte a sur…

Seguro que en esa inmensa lista, en ningún momento, se te había pasado por la cabeza la posibilidad de lo que te propongo con este post: bañarse con cerdos en una playa de las Bahamas.


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Las Bahamas es uno de los destinos más codiciados en los últimos años. Sus arenas blancas, sus aguas cristalinas y la paz que se respira en sus islas han convertido a este destino en uno de los grandes reclamos del planeta. Pero ya no tan solo esto, bañarse con cerdos está provocando un aluvión de turistas en busca de nuevas aventuras en las que vivir.

Aproximadamente un total de 20 cerdos salvajes, junto con algunas cabras y gatos salvajes, conforman la fauna del Cayo Big Major o, más conocido como, Pig Island. Estos capan a sus anchas por las que son, según muchos viajeros, las mejores playas del mundo. Podrás alimentarlos, tocarlos, acariciarlos, e incluso cuando menos te lo esperes puedes verlos nadar como si de unos bañistas más se tratasen.

¿Cómo llegar?

Si has buscado en Google maps el cayo Big Major, seguramente te habrá aparecido en un lugar bastante ilocalizable en el mapa, pero no sufras, se puede llegar más fácil de lo que se cree.

Desde las playas de Exuma se organizan una serie de viajes en barco hasta la isla para poder disfrutar de esta increíble experiencia. No disponen de web ni ningún tipo de información vía online, así que te recomiendo que hables con la recepción de tu hotel para que te asesores correctamente.

La historia…

Es curioso que una isla esté repleta de cerdos salvajes sin explicación alguna. Algunas voces apuntan que estos fueron llevados a la isla por unos marineros que pretendían volver a por ellos, pasado un tiempo, y poder así cocinarlos. Desde entonces se alimentan con la comida de los barcos que hay alrededor y demás alimentos que encuentran por la isla. Otros apuntan que sobrevivieron a un naufragio, y otros, totalmente críticos, consideran que es una acción de marketing turístico.

Yo voy a apuntarlo a mi lista de deseos para el próximo años ¿tu también?

Feliz día

Vicent Bañuls


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