Basta de pelear por la teta o la mamadera

Las nuevas madres no tienen que ser juzgadas por nada: ni su  elección de pañales, por el método para dormir, por el nombre del bebé  o sobre cómo se alimentan a su bebé. Los padres tienen complicaciones suficientes en su vida como para sumarles la presión de tener que preocuparse por lo que otros padres pensarán de ellos.

Parece imposible tener un bebé y no ser víctima de la  comparación de la teta  con la mamadera. Cualquiera que sea el lado que te pongas por  te encontrarás con firmes defensores de uno u otro método de alimentación.

La realidad es que , sólo solo se trata de una nueva mamá tratando de alimentar a su bebé. Una gran cantidad de energía se desperdicia en esta lucha, con algunas nuevas madres de ambos lados se sienten molestos y aislados como resultado de esta pelea vana.

¿No sería genial vivir en un mundo donde no tiene que sentirse mal por la forma en que vos eligiste para alimentar a tu bebé.? Algunas madres que alimentan con fórmula se sienten culpables por no amamantar, y pueden sentir que están siendo juzgados por las mamás que amamantan.  Lo que todos los nuevos padres necesitan, es tranquilidad, apoyo y aliento. Cuando estás privado de sueño, abrumada y hormonal, no tenés la energía para gastar en sentirse mal consigo mismo.

Tu elección

Tu bebé, tu elección. Así de simple. Sí, debés tomar decisiones informadas, pero nadie tiene el derecho de juzgar sobre las decisiones que tomás.

Todas las mamás quieren lo mejor para sus bebés. Cada mamá, cada bebé y cada situación es única, por lo que sólo se puede saber qué es lo mejor para su familia. Todas las madres creen que están haciendo lo correcto, pero en secreto se preocupan de que no lo son. Es muy bueno para ser un apasionado de sus propias decisiones, y creer que está haciendo lo mejor para su familia, pero eso no significa que usted necesita para cuestionar las decisiones de otras madres. Recuerde, ellos son diferentes a usted, y pueden ser influenciados por diferentes factores.

Las mamis sienten que están siendo juzgadas, incluso cuando no lo son. Esto pone a los nuevos padres a la defensiva, defendiendo apasionadamente a sí mismos contra el juicio que nunca existió en el primer lugar. La maternidad no es tarea fácil. Las nuevas madres se están recuperando de la natalidad, adaptarse a la vida con un bebé, aprendiendo cómo seguir en pie después de horas de sueño de cero, y haciendo caso omiso de todas sus propias necesidades.

Centrarse en experiencias compartidas y respetar al otro

Es posible alimentar a sus bebés de manera diferente, pero eso no quiere decir que son polos opuestos. Todas las madres luchan contra dolores de dentición, sospechosas contenidos mirada de pañales, y la privación del sueño.  No todas las conversaciones tienen que centrarse en lo diferente que puede ser la de las otras mamás, en lugar celebrar las similitudes.

La base está en el respeto y en la tolerancia. Disfrutemos de nuestra maternidad y dejemos de juzgar a la otra mami.