Belleza en las palabras

Para mí el arte consiste en tomar un punto de vista de la vida donde la búsqueda de la belleza es la clave, donde el contar historias que tengan algo especial, prima. Hay muchos tipos de arte y no todos valemos para todos: hay excelentes pintores y algunos somos torpes hasta más no poder, también impactan las esculturas hechas con arena por poner un ejemplo o las melodías que escuchamos por la radio. Otros, nos concentramos en las palabras, ya sea para expresarnos o para contar algo o simplemente como una buena vía de escape en la que plasmar las ideas que tenemos en la cabeza. 

Pero, ¿qué necesita un escritor? Esto es lo que pensé cuando hace un mes me senté para comenzar a escribir algo que tenía en la cabeza desde hacía muchísimos años, pero que por poca motivación y poco apoyo, no hice. Así que ¿qué era lo que necesitaba? Estas son mis ideas personales, por supuesto, que dependiendo de cada uno podrán variar o no. Si sirve de guía para alguien que no sepa por dónde empezar, o que no encuentre la fuerza suficiente, se puede sacar de donde sea.  Se necesita algo de inspiración. Por supuesto, podemos centrarnos en un mundo imaginario, en una persona o incluso en algo cotidiano. Los antiguos griegos creían en que la inspiración la concedían las Musas; y aunque es difícil creer que existan físicamente, dentro tenemos una musa particular que nos lleva hacia un camino u otro. 

También se necesita algo de relax, tranquilidad, un buen ambiente en que no podamos escapar de los ruidos y del estrés. Aunque cueste, para escribir, es mejor tener el teléfono móvil apagado, para no distraernos. 

Y personalmente, dependiendo del escrito, me gusta tener una buena melodía que  me lleve al nivel de relax y desconexión que necesito. Ahora suelo escuchar El Lago de los Cisnes, una melodía deliciosa. 




Las cosas han cambiado y la vida ha evolucionado hasta el punto que podemos observar estos cambios tan notables. Puede que la literatura y el escribir ya no sea como antes, cuando parecía que se hacía con más pasión con plumas o máquinas de escribir, o en esas buhardillas donde los escritores de la Bohemia francesa guardaban celosamente sus escritos. Pero esto no quiere decir que ahora sea peor, todo depende del corazón y las ganas que pongamos. Y sobretodo: de lo que queramos contar. 
No tratéis de guiar al que pretende elegir por sí su propio camino. (William Shakespeare) xoxo Nerea.