Benjamin Franklin, Parte I, Paul Elmer Más

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Cuando el informe de la muerte de Franklin llegó a París, recibió, entre otras muestras de respeto, este significativo honor por parte de uno de los clubes revolucionarios: en el café donde se reunían los miembros, su busto estaba coronado con hojas de roble y en el pedestal debajo fue grabada la palabra únicavir . Este simple encomio, que recuerda a Napoleón Este es un hombre después de conocer a Goethe, resume mejor que un volumen de panegírico lo que Franklin fue en su época y lo que su vida aún puede significar para nosotros. Actuó en un momento como comandante de las tropas, sin embargo, no se lo puede llamar soldado; él era un gran estadista, pero no entre los mejores; hizo descubrimientos famosos en ciencia, pero apenas era un científico profesional; LEER MÁS »