18 kilómetros de la costa ártica del Golfo de Ob (al noroeste de Siberia), fueron adornados con cientos de bolas de nieve. Un hecho como nunca antes habían presenciado los habitantes del lugar.
Estas bolas de nieve son formadas cuando el agua del mar del Golfo de Obi hace contacto con el hielo de la playa. El agua entra en contacto con los fuertes vientos que bajo temperaturas gélidas moldea el hielo y lo convierte en bolas perfectas de diferentes tamaños.
Los tamaños varían bastante; desde pequeñas pelotas de tenis hasta llegar a tener el tamaño de pelotas de voleibol, estas esferas tienen una uniformidad bastante peculiar, las cuales han empezado a aparecer de forma espontánea.
Aunque nunca antes se había registrado un caso de estos en esta región, este fenómeno ha aparecido antes en el lago Michigan en 2014. También se han registrado casos en Finlandia y en otros países nórdicos.
Este fenómeno se puede repetir en cualquier zona circunpolar, claro está que sucederá solo cuando el mar esté tranquilo y el hielo se encuentre medio fundido. Según Meteorólogos estadounidenses, aseguran que con este fenómeno natural se anuncia la llegada de enormes nevadas en América del Norte y Europa Occidental
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