Boston. el infierno espera.

Fuente: Celticsblog.com

La verdad es que tras lo visto ayer, pocas ganas tengo de escribir el artículo. El enfado que llevo encima es tremendo y las ganas de acabar ya con los Magic infinitas. ¿Juego sucio por parte Boston? es lo que muchos dicen, pero jamás hemos ido a lesionar jugadores, jamás hemos soltado codazos, hecho dos contra unos con rodillas, codos demás por medio, paredes.... el juego "sucio" de Boston se demuestra con defensas duras, muy duras, pero siempre legales y no con mamporros y codazos traicioneros.
Los Orlando Magic han ido a lesionar, a castigar físicamente a cada una de las piezas importantes de Boston. Lo más cojonudo, perdón por la expresión, ha sido la actuación del conjunto arbitral. Las dos técnicas que Kendrick Perkins recibió han sido totalmente injustas. En ningún momento se ha dirigido al árbitro. Tan sólo estaba jugando duro contra Howard. La cosa estaba funcionando y como tal, pues que mejor opción que sacar a Perks del partido y dejar el camino libre para Dwight.
Respecto a Howard se pueden decir muchas cosas, es un comediante, una aparente buena persona, pero tras esa primera capa se esconde uno de los jugadores más sucios de la liga. Es indignante verle soltar los codos en cada jugada. Asco, eso es lo que me ha dado ayer Howard.
Para que luego critiquen a Garnett. Él recibió una suspensión por mucho menos. ¿ Por que Dwight no? ya se le han perdonado dos en estas series. Ayer hizo otras dos gravísimas. Primero casi le rompe el cuello y los hombros a Pierce y luego dejó totalmente K.O. a Glen Davis. Son razones de sobra para suspenderle y más aún para que no dure en cancha más de 25 minutos. Finalmente acabó con 2 faltas personales. Indignante.
Boston acabó con 4 hombres fuera de la cancha. Dos de ellos por lesión (Daniels y Davis) otro por dos técnicas injustificadas (Perkins) y el último por acumulación de faltas (Rasheed). Así es imposible ganar. Si el rival tiene permitido todo tipo de acciones sucias y la liga de su parte apaga y vámonos. Lo que ayer se vivió no es deporte, es marketing, interés propios y la demostración, una vez más de que la liga cada día apesta más y más. David Stern cada día me parece menos apto para dicha posición. La liga debería considerar quitar el mandato vitalicio. Cómo bien es sabido a través de la historia, esto acarrea intereses propios, soberbia, manipulaciones, corrupciones...
La crítica de hoy no es hacia el equipo. Hicimos nuestro papel a pesar de no haber jugado nuestro mejor baloncesto tuvimos opciones realmente durante los tres primeros cuartos pero las cuatro bajas sufridas significaron un gran lastre para un equipo que sigue usando una rotación excesivamente corta. Nate Robinson salió y lo hizo bien, un triple, un tapón y 5 puntos en 8 minutos.
Ahora, tras pasar unas horas después del partido Perkins podría recibir la noticia de su más que posible suspensión para el sexto juego. Davis quizás no juegue a causa de su conmoción cerebral y tanto Pierce cómo Sheed jugarán tocados. Uno con el cuello y los hombros desencajados, el otro con la rodilla magullada.
Es hora de sacar a relucir el orgullo verde. Hora de demostrar de que pasta están hechos estos chicos, de mostrar el infierno que el Garden puede llegar a ser y sobretodo de llevarnos ya una serie que a causa del interés del señor Stern está durando demasiado. Señores, vayamos encendiendo los puros al más clásico estilo del gran Red Auerbach. Nos han violado, han dejado nuestra dignidad por el suelo. No nos han mostrado respeto alguno y tanto la liga como los Magic han de saber que se la han jugado al mejor equipo de la historia. A la peor afición posible. Al infierno verde.
Tanto si Boston pierde, como si gana, este equipo jamás deberá ser criticado. Han demostrado entrega y lucha hasta el final. Aún con todo en contra hemos llegado a estar a 6 puntos. Nos ha faltado ese apoyo del público. Ese estado de gracia de Rondo y Garnett y un poco de imparcialidad arbitral. El sexto juego va a ser infernal para los Magic. Los decibelios en el Garden van a marcar registros jamás vistos antes.
VAMOS BOSTON