Para disfrutar de esta fondue vamos tendremos que preparar por un lado el chocolate y por otro las brochetas de frutas.
Como el persimón y la mayoría de frutas una vez peladas y cortadas comienzan a oxidarse, hay que tomar la precaución de tomar las brochetas cuanto antes una vez preparadas. También podemos emplear el clásico truco de rociar la fruta cortada con unas gotas de limón para que se conserve mejor durante más tiempo.
Las brochetas de frutas pueden tener un aspecto muy vistoso si ponemos un poco de imaginación:
Para preparar el chocolate utilizaremos:
- Chocolate para fundir
- Un par de cucharadas de Ron o whisky
- Avellanas o almendras
Molemos las avellanas, en su defecto podemos utilizar almendras, y las reservamos.
Fundimos el chocolate en una cazuela removiéndolo a fuego lento. Una vez fundido le añadimos un par de cucharadas de Ron o Whisky y las avellanas molidas.
Lo colocamos en el recipiente de la fondue para mantenerlo caliente.
Para las brochetas utilizaremos frutas de temporada, es decir la fruta de la que dispongamos en ese momento. También podemos utilizar fruta en almíbar así como nuestros persimón congelados.
Así dependiendo de la época en la que nos encontremos podemos utilizar melón, melocotón, pera, plátano, manzana, persimón, mandarina, kiwi, fresas y frutas del bosque entre otras muchas.
Las pequeñas bayas como fresas, frambuesas o moras las usaremos enteras. Otras como el kiwi o el plátano las cortaremos a rodajas.
Por su parte el persimón y las otras frutas de textura similar las cortaremos en cubos.
Por último ensartaremos las frutas con buen gusto en los pinchos para brochetas y las degustaremos bañadas en el chocolate fundido.