Camiseta blanca / camisa negra

Creo que nunca he subido dos posts el mismo día. Estaba en casa, con mi camiseta blanca de una conocida cerveza con la que se piensa en verde; pero, como esta vida es así de puta, ahora llevo una camisa negra.
He hablado de él más de una vez en este blog, de uno de los mejores escritores de esta región y una persona sin parangón (háganme caso).
Hoy estamos todos tristes, compañero. No es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo, no es justo.
Besos.
CHARO Y OTROS POEMAS
Eres un poema, cierto, pero no uno de ésos
que se pudren en las páginas de oscuras
antologías del siglo dieciocho
o fanzines de los años noventa: tú eres uno
que todo el mundo se sabe, cuyos versos repiten
en la radio y en la escuela, y la gente se dice
ante una chica bonita, o si se hacen unas risas,
o son felices, o, sobre todo, al llegar a casa
mientras fuera está cayendo la tormenta del milenio.
José Daniel Espejo