Canelones de pollo

Ingredientes:
•   Una pechuga de pollo (en este caso usé una pechuga de un pollo asado que había sobrado del día anterior)
•   Una lata de paté a las finas hiervas
•   Una cebolla
•   Un puerro
•   ½ vaso de vino blanco
•   4-5 ajos tiernos (en su defecto, un par de dientes de ajo)
•   Placas de canelones o lasaña precocida
•   Salsa bechamel
•   Sal
•   Pimienta
•   Aceite de oliva virgen
Preparación:
   En primer lugar picamos las verduras y la pechuga en brunoise. Cuando ya lo tengamos preparado, en un rondón al fuego, ponemos un par de cucharadas de aceite e incorporamos las verduras. Salpimentamos y dejamos pochar unos diez minutos tapado a fuego medio. Removemos de vez en cuando.

   Mientras nuestra verdura se va pochando, vamos a poner una olla con agua y sal al fuego para que se caliente, la necesitaremos para hidratar más adelante la pasta.
   Cuando nuestra verdura se haya pochado en su mismo jugo (por eso la hemos tapado), le añadimos nuestra pechuga, removemos bien y acompañamos con la lata de paté. Rehogamos todo junto unos minutos y a continuación le añadiremos el vino.
Dejamos que evapore el alcohol, bajamos el fuego y dejamos pochar unos 5 minutos más, hasta que el vino haya evaporado casi por completo.
   Una vez terminado, apartamos del fuego y con la ayuda de la batidora, lo trituramos un poco, pero no del todo, solamente para que nuestra farsa se una y cree una pasta más homogénea, pero recordad, no debe quedar como una pasta, no es necesario.
   Mientras nuestra farsa reposa y se enfría un poco, vamos a proceder a hidratar nuestra pasta. Para ello, incorporaremos las placas de canelones o lasaña sobre una bandeja y las rociaremos con el agua que previamente habíamos puesto a calentar. Dejamos reposar nuestras placas unos 15 minutos en el agua caliente y las escurrimos en un paño para quitar el exceso de agua.

  
   Una vez hidratada la pasta y la farsa más fría, es el momento de montar los canelones. Para ello, ponemos las placas de pasta sobre nuestra mesa de trabajo, le ponemos un poco de nuestra farsa y enrollamos. Listo!
Normalmente, cuando hago este tipo de elaboraciones, suelo hacer en gran cantidad, pues son recetas aptas para congelar y en cualquier momento te sacan de un apuro.
   Cuando los tengamos ya todos montados, napamos con un poco de salsa bechamel, ya sabéis, harina, mantequilla, leche, sal, pimienta y nuez moscada, y por ultimo espolvoreamos con queso rallado al gusto. Y como comenté antes…..

Espero que os haya gustado mi receta de aprovechamiento y os prometo que seguiré con esta técnica de reciclar la comida de por vida! Y espero, que compartiéndola con vosotros!