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‘cazadores de sombras: ciudad de hueso’: esto con buffy no pasaba

Publicado el 29 agosto 2013 por Cintasperdidas @cintasperdidas

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Érase una vez una chica dispuesta a entregar su corazón a un hombre lobo y a un vampiro. No, espera, eso ya está inventado. Érase una vez una escuela de Magia oculta a los humanos. No, espera, eso ya me suena. Érase una vez un malo malísimo que era de los buenos buenísimos pero que se cambió de bando por tener más poder. Eh, espera, eso ya lo han usado mil veces. Érase una vez una chica que descubre que proviene de un linaje con superpoderes y que debe luchar contra el mal cada día. Uhm, no, es la historia de siempre. Bueno, mezclémoslo todo y listo.

Dicen que todo ya está inventado, pero apostaría mi mano a que así nació la nueva saga sobrenatural/romántica de moda escrita por Cassandra Clare, Cazadores de sombras. La primera parte, Ciudad de Hueso, nos presenta la historia de Clary, una joven ingenua cuya vida se tambalea al presenciar un misterioso asesinato. Perder a tu madre, descubrir que el mundo está dominado por demonios y que debes cazarlos, y enamorarse de un chico malo son suficientes motivos para desatar cualquier brote de ansiedad adolescente. Pero nuestra protagonista lo lleva bastante bien, embutida en cuero negro y dispuesta a matar, Clary (Lily Collins) se alza como un personaje mucho menos pasivo agresivo que su predecesora de la saga Crepúsculo.

Lily Collins;Jamie Campbell Bower;Kevin Zegers

Lo peor (o lo mejor, depende de cómo se mire) de Cazadores de Sombras: Ciudad de Hueso es que roza lo delirante en muchos puntos de su historia. Las líneas resultan tan obvias, gastadas y exageradas que no sabes si son un homenaje parodiado al género o si de verdad intentan aportar algo a la trama. El diálogo sobre si Johann Sebastian Bach fue un Cazador de Sombras resulta digno de ser subido a Youtube para el deleite de todos.

Pero debemos juzgar a las cosas por lo que son, y siendo sinceros, Cazadores de Sombras: Ciudad de Hueso tiene todos los ingredientes indispensables (y alguno más de sobra) para triunfar en su público objetivo. Yo seré ya demasiado mayor, pero tras ver la película no paro de pensar en Buffy, cazavampiros. No, esto con Buffy no pasaba.


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