Chito y Pocho, la sorprendente historia de dos amigos inseparables

El post de hoy lo vamos a dedicar a contar la historia de dos inseparables amigos. Hasta aquí, nada novedoso ni fuera de lo que se puede considerar normal. Pero, ¿y si os digo que Chito es un hombre y Pocho un cocodrilo? La cosa cambia, no?

Esta historia se remonta a principios de la década de los 90 en Costa Rica. Como os decíamos, Chito (su verdadero nombre es Gilberto Sheden) es un pescador costarricense de la pequeña localidad de Siquirres.  Por su parte, Pocho es un cocodrilo que fue recogido por Chito en su barca cuando el primero se encontraba malherido. Había sido disparado por un lugareño después de haber atacado a su ganado. Chito nunca hubiera pensado que ese cocodrilo moribundo iba a cambiar su vida para siempre. Le asistió y lo curó hasta que consiguió restablecerse completamente de sus heridas. La idea inicial de Chito no era sino quedarse con su piel y sacar algún dinero con ella.

Sin embargo, según fue pasando el tiempo, la complicidad y la química entre ambos fue en aumento. Tal es así que esa amistad duró 20 años, hasta que el cocodrilo murió a la edad de 50 años.

La popularidad de esta extravagante pareja no pasó desapercibida y la fama de ambos creció como la espuma. Si buceáis por ahí seguro que encontráis muchos videos de ellos. Y es que Chito, el “Encantador de Cocodrilos”, alcanzó tal nivel de amistad con el animal que hasta los investigadores que colaboraron en alguno de los reportajes que le hicieron, dijeron no haber visto nada así antes.

Un cocodrilo como mascota, desde luego, no es nada habitual. Llegaron incluso a preparar un espectáculo en el que ambos hacían malabares juntos. La verdad es que es absolutamente asombroso ver como dos seres tan distintos pueden llegar a ser tan buenos amigos. De hecho, a la muerte del cocodrilo, Chito dijo haber perdido prácticamente a un hijo. Y así lo sintió también la localidad de Siquirres, que lo despidió organizando una caravana fúnebre para que todo el mundo pudiera darle un último adiós al animal.

Verdaderamente, una preciosa historia que nos hace reflexionar acerca de la amistad y los lazos afectivos que un cocodrilo puede llegar a crear…