Cine Olímpico (III)

Mientras Bolt sigue rompiendo la barrera del sonido en el estadio de Stratford, nosotros seguimos con nuestras olimpiadas particulares en este penúltimo número en el que nos acercamos al hockey, la lucha, la natación, el remo, las artes marciales y el tenis.

HOCKEY - CLERKS

Vamos a cambiar el césped azul de Londres por el tejado del Quick Stop. Ya sabemos todos que Kevin Smith es un gran fanático del hockey sobre hielo, por eso no es nada raro que el bueno de Dante cierre la tienda para irse al tejado a jugar al deporte del stick, al fin y al cabo era su día libre.
LUCHA - LEGENDARY

A los luchadores de Wrestling también les pica el gusanillo de la actuación, desde Hulk Hogan en películas tan míticas como 3 Ninjas en el parque de atracciones a recientemente gente como Edge, Triple H, Kane, Randy Orton o Big Show que también han hecho sus pinitos. Pero resulta raro en encontrar a un luchador en un drama como éste, de manual, sí, pero efectiva historia de un hombre fracasado que ayudará a su hermano pequeño a triunfar en el mundo de la lucha libre de instituto.
REMO - LA RED SOCIAL

Aún no sabemos muy bien como La Red Social no ganó el Oscar a mejor película y menos aún como Fincher no ganó el galardón a mejor director, sobre todo cuando vemos escenas como la carrera de remo que nos siguen poniendo los pelos de punta, ojito a la fotografía y al montaje, todo al ritmo de In the Hall of the Mountain King. Para quitarse el sombrero.
TAEKWONDO (Y DIVERSAS ARTES MARCIALES) - KICKBOXER

Vale, hemos hecho trampa, si el Kárate fuera deporte olímpico nos lo pondrían más fácil, pero con el Taekwondo y el Judo nos lo complican, por eso buscamos un deporte como el kickboxing que sin entender mucho, sabemos que dan hostias como panes y con todas las partes del cuerpo, parece bueno para unificarlo. Una de las películas más míticas de Van Damme y además con un malo tan enorme como Tom Po. Aún recordamos la pelea final con muchísimo cariño.
TENIS - MATCH POINT

Un profesor de Tenis buscando entrar en la alta sociedad era la base de la mejor película de Woody Allen en los últimos 20 años. Una película negra que nos recordaba enormemente a Delitos y Faltas y que formaba una divertida trilogía con Miranda y Miranda y Scoop. Aún se nos eriza la piel con ese anillo balanceándose en la barandilla como una pelota sobre la red de tenis.