Claves para no arruinarte en un viaje a Londres

Cada vez más, la ecuación ingresos menos gastos supone un punto de partida para muchos viajeros que ahora pueden descubrir mil lugares habiendo reducido lo que vale por ejemplo un avión. Viajamos más barato y viajamos más. Y en destinos cuyo nivel de vida se diferencia en gran medida del nuestro, muchos necesitamos ahorrar. Ello hará que en el futuro conozcamos más lugares y eso es nuestro más preciado bien. Hoy intentaré dar algún consejo para viajar a Londres y no arruinarnos. ¡Es posible!

Mira con tiempo el avión

Dado que para viajar a Londres hay opciones en compañías de bajo coste, será posible viajar por poco dinero. En mi caso, no salió así, porque no lo saqué con tiempo de antelación. Si lo hacemos de esta forma e intentando ser flexible en las fechas y evitando fines de semana, puede salir muy asequible. Más barato incluso que como si fueras a Asturias en coche y volvieras en el mismo fin de semana. Así que muy barato, podríamos decir.

Investiga bien el alojamiento

Este es quizás uno de los puntos más clave para poder ahorrar un dinero importante. Por eso, te aconsejo que dediques tiempo a reservar el alojamiento. Para ello, valora las diferentes opciones que tienes, pero yo haría hincapié en los apartamentos en Londres, pues puedes hacerte con un piso que esté bien y que te permita además ahorrar en las comidas. Sobre todo, en los desayunos, que es una parte del viaje que a veces se olvida y que puede suponer unos cuatro euros por cabeza todos los días.

Evidentemente, si te alejas del centro, pagarás menos y hay determinadas zonas que están bien comunicadas para ir y venir a diario. Asimismo, la opción de los pisos es ideal si vas en grupo; y algo más cara si viajas por ejemplo en pareja.

El mejor medio de transporte, el metro

El medio de transporte más cómodo en Londres es el metro. Llega a todos los puntos importantes y como en otras ciudades, se entiende mucho mejor que otras redes de transporte, como la del autobús. Para pagar, lo que debemos sacar es la tarjeta Oyster. Vale 5 libras pero al final del viaje, puedes devolverla y volver a tener tu dinero. Cada viaje carga una cantidad determinada según la distancia, por lo que debes estar también atento para no quedarte sin saldo.

Actividades; la mayoría, gratuitas

Londres no resulta nada cara en cuanto a muchas de las actividades que ofrece, ya que tiene mucho que ver paseando y porque hay ciertos museos que son de entrada gratuita, como el Tate Modern o el British Museum. Ver el Big Ben, el cambio de guardia en el Palacio de Buckingham, pasear por Hyde Park o el Soho, la torre de Londres exteriormente o la plaza Neal’s Yard son algunos planes que no debemos perdernos y disfrutar de sus mercados -como Portobello, Candem o Spitalfields-, toda una obligación para disfrutar del Londres más auténtico.

Por ello, esta es la parte donde, a no ser que tengamos un empeño especial en subir a la London Eye o visitar la Abadía de Westminster -que sí recomiendo- no te gastarás demasiado en conocer la ciudad.

La comida rápida, una posible solución de ahorro

En las ciudades caras, yo procuro ahorrar en al menos una de las comidas. Si podemos desayunar en el apartamento, ya tendremos mucho ganado. Por otro lado, a la hora de comer o cenar, podemos hacernos con comida rápida en muchos puntos de la urbe y no dejarnos ningún pastizal. En los principales mercados casi siempre hay buenas hamburguesas que además casi suponen una experiencia en sí misma y si no, en los variados pubs donde también se puede comer, tenemos igualmente este tipo de platos. Por ejemplo, en el Soho también hay bastantes puestos callejeros. En la comida restante, ya podremos sentarnos y comer de plato y más sano, que tampoco es muy caro, aunque depende de la opción que elijamos.