Colegio Bicentenario en Popayán, Colombia

OBRAS

COLEGIO BICENTENARIO EN POPAYÁN, COLOMBIA · 06/10/2016

El colegio Bicentenario se encuentra ubicado en el sector --marginal de Matamoros a las afueras de la ciudad de Popayán. Este sector es una urbanización informal donde la conformación social es producto del devenir espontáneo de familias en situación de desplazamiento forzado. La parcela, en desuso durante largo tiempo, ofreció a esta comunidad un lugar de encuentro a través del deporte y de actividades comunales. Conservar su función de parque lúdico fue una premisa del diseño del proyecto, un colegio con vocación social que ofrece a la comunidad algunos de sus usos como las zonas deportivas y la biblioteca.

Fotografía: © Johnny Trujillo

Al resolver el programa se opta por un sistema de naves funcionales de una sola crujía con un desarrollo estructural típico de pórticos y zapatas de hormigón que simplifica su construcción, ahorra recursos y, además, resuelve óptimamente la rigurosa normativa de sismo resistencia que exigía un edificio público en esta región del país.

Fotografía: © Johnny Trujillo

La materialidad de su contexto, ladrillo visto de arcilla clara, ofrece al proyecto una tectónica que lo acerca a una tradición constructiva presente en todas las formas de arquitectura de la ciudad. El ladrillo es el material más democrático posible en la zona.

Fotografía: © Johnny Trujillo

El Colegio se compone de cuatro naves funcionales. El bloque 1, más largo, ofrece un paramento sobre la vía principal y es donde se encuentran la biblioteca, el salón múltiple, la administración y la planta técnica. El bloque 2 agrupa las aulas de bachillerato y talleres en relación directa con el patio verde de mayor tamaño. El bloque 3 está destinado a educación primaria y conforma con el bloque 2 su patio. Y, por último, el bloque 4, de una sola planta, para minimizar el impacto sobre un callejón peatonal y las casas vecinas, acoge preescolar con su patio. Esta configuración deja libre de paramento la zona deportiva, dándole accesibilidad directa desde el barrio y permitiendo la presencia de la biblioteca en el espacio público. La circulación se hace a través de corredores generosos y rampas que se ubican a manera de diafragma entre los bloques y la zona deportiva para poder establecer un futuro control en caso de que el edificio se utilice eventualmente como espacio público.

Fotografía: © Johnny Trujillo