¿Cómo eliminar el acne?

Quién no ha sufrido antes o después por el acné. Quién no ha pensado: “hoy no salgo de casa por esos granos que me invaden la cara y parecen haber alquilado a tiempo completo mi rostro”.  El acné tiene solución y decirle adiós de manera eficaz es viable. Sandra Delgado.

Esta es una enfermedad de la piel basada en  la inflamación de las glándulas sebáceas  a consecuencia de una infección bacteriana que se sobreinfecta. Son muchos los tipos de acné con los que nos podemos encontrar y diversos tratamientos, por tanto, para combatirlo. No solo los adolescentes son los protagonistas de esta incómoda problemática. Cierto es que, durante la pubertad y con los cambios hormonales son muchos los que la padecen diariamente. Pero eso no implica que los adultos estén libres de sufrirla. Según los últimos estudios médicos realizados en España, recogidos por la Doctora Aurora Guerra, del Servicio de Dermatología del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid, son las mujeres mayores de 25 años quienes con más frecuencia sufren esta patología. Algunas de las conclusiones de este señalado estudio indican que solo el 3% de los hombres mayores de 25 años, padecen acné mientras que el porcentaje de mujeres supera el 10%

Las mujeres:  blanco perfecto para el acné

El Servicio de Dermatología del Hospital 12 de Octubre señala que son las mujeres un segmento poblacional más propicio a padecer acné. La razón es porque hay mayor secreción de sebo. Pero éste no es el único factor; de hecho los fármacos, la situación laboral, el estrés, los propios cosméticos y el tabaco también incentivan a la aparición de éste. La Doctora Guerra y la Doctora Raquel Rivera presentan al tabaco como un factor agravante. Y es que según su estudio las mujeres fumadoras entre 25 y 50 años tienen más predisposición a desarrollar la enfermedad.

El acné puede desarrollarse de distintas formas: desde pequeños granos rojizos, que previsiblemente desaparecerán con el tiempo, pasando por lesiones más traumáticas como son  los quistes o las pústulas. Para diferenciar entre ambos, hay que tener en cuenta una sencilla clasificación: lesiones inflamatorias o lesiones no inflamatorias.  Dentro de la rama de las inflamatorias encontramos a los granos de tono rojizo, las pústulas y los quistes. Y en la segunda hallaríamos a las espinillas o los también conocidos puntos negros. Para todas ellas hay un tratamiento recomendado, después evidentemente de haber hecho un estudio clínico exhaustivo para determinar el  método más indicado para acabar con él.

Tipos de tratamientos

Los tratamientos que encontramos para acabar con la enfermedad son múltiples y variados, y cada vez más efectivos. Desde la Clínica Pedro Jaén (www.grupodermatología.es) nos ayudan a conocer más a fondo cada uno de ellos. Dependiendo del grado de desarrollo del acné elegiremos uno u otro. El objetivo que se busca, independientemente del tipo de acné que hayamos desarrollado, debe ser la reducción progresiva de las secreciones sebáceas. Uno de los aspectos que más destacan los médicos es que cualquier terapia es continuada. Por eso, es fundamental la motivación del paciente y no decaer en el proceso de superación de la enfermedad.

Un tratamiento para un adolescente no es el mismo que para un adulto que presenta un cuadro clínico de acné tardío. Aunque la mayoría de los pacientes no suelen presentar trastornos hormonales, es recomendable solicitar una prueba de alteración de las mismas antes de comenzar cualquier tratamiento.

Existen cinco tipos de tratamientos: tópico, a través de la toleración del peróxido de benzoílo; el tratamiento sistémico, cuya respuesta suele ser muy lenta. Suele tratarse mediante la isotretinoína  oral, durante 4 a 6 meses, evitando este tratamiento a mujeres en periodo de embarazo. El tercero sería la aplicación de un adyuvante, para tratar lesiones quísticas empleando corticoides, que disminuyen así la inflamación y el dolor, durante un máximo de cuatro semanas. Sin embargo, tal y como presenta la clínica Pedro Jaén, existen dos métodos más dentro de esta última parcela: láser de colorante pulsado y la terapia fotodinámica. El uso de cualquiera de ellas combinadas con cualquiera de los anteriores tratamientos, mejoran sensiblemente las zonas inflamatorias.

En el caso del láser de colorante no requiere de anestesia, se aplicaría una vez al mes, incluso en ocasiones podría llegar a ser trimestral y tras el tratamiento no se produciría ninguna marca facial. Los resultados, aseguran desde la clínica, serían visibles a partir del tercer mes. En cuanto a la última terapia, la fotodinámica: se hace uso de una lámpara de diodo durante pocos minutos, después de haber aplicado una crema que habrá actuado entre 1 y 3 horas en las partes afectadas. Un tratamiento presentado como fácil, indoloro y que no conlleva recuperación. Tan solo existe la posibilidad de un leve enrojecimiento de la piel. Obteniendo una mejor textura, eliminando pequeñas arrugas, cerrando poros y borrando los excesos del sol.

Conclusiones:

-   Existen tres tipos de acnés: adolescente, persistente y el de comienzo tardío. Los dos últimos se presentan en adultos.

-   Las causas del acné son múltiples y en muchos casos desconocidas. Pero tras los últimos estudios, el consumo de tabaco ha sido señalado como un factor que incrementa el riesgo de padecer la enfermedad.

-   El tratamiento del acné es diferente dependiendo del cuadro que presente el paciente.