La fuente mágica es un artefacto bastante simple en el cual podremos visualizar los efectos del cambio de presión de una manera divertida y muy didáctica.
Materiales
- Un recipiente de vidrio con su tapa.
- Una cañita o pajilla para gaseosas.
- Pegamento.
- Un recipiente con agua coloreada.
Creando nuestra fuente mágica
Lo primero que vamos a hacer, es crear un agujero en el centro de la tapa del recipiente de vidrio de un diámetro un poco superior a la del diámetro de la cañita. Luego, introducimos la cañita por el agujero, la fijamos con ayuda de pegamento y dejamos secar. Debemos tener en cuenta que debe haber unos5 cmde cañita a ambos lados de la tapa.
Ahora, es momento de llenar el tarro de vidrio con agua caliente, revolvemos el agua un rato y la vaciamos. A continuación, tapamos el recipiente fijándonos que la cañita esté bien fija a la tapa.
Seguidamente, colocamos un tarro de agua coloreada con una boca grande para que el recipiente que acabamos de tapar pueda ingresar boca abajo sobre dicho recipiente. Vamos derramando agua fría sobre el tarro de vidrio tapado y veremos como el agua coloreada sube por la cañita como una especie de fuente de color.
Cómo funciona
El aire caliente dentro del frasco de vidrio se enfría súbitamente cuando derramamos agua fría en las paredes del frasco, esto desencadena una disminución de la presión dentro del envase, de esta manera, el líquido de la parte inferior es impulsado a la sección de baja presión, fluyendo hacia arriba, como si hiciéramos un vacío, de esta manera funciona la fuente mágica.
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