Cuando nos encontramos ante fallos eléctricos en zonas donde necesitamos iluminación, y no tenemos sistemas de electricidad o fuentes de energía disponibles, es primordial contar con una luz de emergencia que pueda proporcionar iluminación básica durante algunos minutos. En este tutorial, veremos cómo hacer una luz de emergencia con una botella, la cual, podemos utilizar en caso de emergencia o simplemente, como un buen experimento de ciencias.
Materiales
- Bicarbonato de sodio.
- Agua oxigenada (Peróxido de hidrógeno).
- Bebida gaseosa de sabor a limón o cualquiera que sea transparente de 500 o 600 cc.
Armando nuestra luz de emergencia
Lo primero que vamos a hacer, es vaciar 2/3 del contenido de la botella de gaseosa de limón, dejando cerca de 1/3 de su contenido.
Ahora, viene el segundo paso, debemos adicionar dentro de la botella (con 1/3 de su contenido de gaseosa) una cantidad equivalente a 1/3 de cucharada de bicarbonato de sodio. Debemos adicionarlo con cuidado y no revolver para que la reacción no se desarrolle tan rápidamente.
Seguidamente, adicionamos dentro de la botella el contenido de 3 tapas de agua oxigenada. Una vez hecho esto, debemos cerrar la botella y mezclar fuertemente agitando el contenido durante algunos segundos.
Podremos apreciar una fluorescencia que podrá iluminar una pequeña zona como una luz de emergencia, lo que nos será muy útil durante cualquier tipo de eventualidad, o simplemente, para contar con una luz referencial en alguna fiesta, reunión, o para utilizarla como una buena presentación en una feria de ciencias.
A continuación, podremos ver un video donde apreciaremos los detalles de este curioso experimento:
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