Revista Pareja

Cómo recuperar a tu ex

Por Cristina Lago @CrisMalago

recuperar ex

Si en el artículo Cómo (no) recuperar a tu ex hablábamos sobre las tácticas más utilizadas para retomar una relación cuando es el otro quien ha dejado, ahora trataremos sobre lo contrario. ¿Qué hay que hacer para recuperar a un ex que se ha marchado?

En primer lugar, antes de iniciar una ofensiva para recuperar a nadie, date unos pocos días para asumir y digerir el shock. Cuando nos dejan, entramos en una especie de desesperado síndrome de abstinencia que nos ciega y actuar movido por los impulsos durante este breve periodo de descontrol no es recomendable ni para recuperar a nadie, ni para recuperarte tú. ¿Te irías a una fiestaza en Pachá Ibiza a los dos días de haber decidido dejar el alcohol? Pues con tu ex, lo mismo.

En segundo lugar, destierra de tu mente la frase “recuperar a tu ex”. Las personas no se recuperan, porque no son propiedades de nadie. No se pierden, se marchan. Por tanto, son ellos quienes deben volver por su propio pie y voluntad: no todo depende de que cumplas con unas pautas determinadas que no admiten margen de error, sino de que la otra persona experimente ganas de tener una relación contigo. Intenta relajarte: si en lugar de intentar arreglarlo, se marchan, la pelota ya no está en tu tejado.

Entonces, te preguntarás ¿qué puedo hacer? Si no sirve usar técnicas, ni provocar celos, ni mantener una falsa amistad, ni ofrecer sexo, ni dar pena, ni hacer un numerito romántico, ni suplicar…¿cómo hago para que vuelva mi ex?

Es posible que a estas alturas hayas oído hablar del llamado contacto cero o ley del hielo. Cuando una relación se termina, cuando dos personas rompen un vínculo, queda una herida que sólo el tiempo y la distancia consigue restañar. Permanecer en contacto con una ex pareja reciente es como reconectar ese vínculo de forma breve y forzada, sólo para ver de nuevo como se rompe una y otra vez, condenándonos a experimentar el dolor de la pérdida en mil pequeños ecos insoportables.

 Por ello, es esencial interrumpir toda comunicación con la otra persona. No importa el tiempo que llevéis juntos o lo muy integrados que estéis en vuestros respectivos entornos, o la amistad que hubiera antes de establecer la relación: una ruptura crea un mundo de añicos que hay que recoger y sanear para lo que ambos miembros de la pareja puedan adaptarse a este cambio sin constantes interferencias del pasado. No es inhumano, ni grosero, ni desconsiderado: lo que es inhumano es intentar mantener a toda costa un contacto que nos hace daño por aquello de quedar bien o por mantener el fantasma de una relación que ya no está.

Es momento de respetarte y entender que ahora mismo la persona que más te necesita a su lado no es tu ex, sino tú.

Al iniciar este nuevo periodo en el que te dedicas a ti y no a perseguir a una persona que se ha ido de tu vida, eliges el único caballo ganador de la carrera. Por una parte, cuanto antes te separes emocionalmente de esta persona, antes iniciarás el proceso de duelo; y por otra parte, si hay alguna ínfima posibilidad de que una ex pareja vuelva, ocurrirá sólo si piensa que puede perderte, algo en lo que no pensará si te tiene ahí a sus pies mendigando que te quiera.

Ojo, el contacto cero no es una táctica para hacer que una ex pareja vuelva y no se recomienda (ni se debe recomendar) a estos efectos, porque no se trata de esconderse mientras se espía a la otra persona desde las sombras, esperando su reacción. Nada más contraproducente para ti, pues alargarás la agonía y te estancarás permaneciendo a la espera de alguien que no puedes saber jamás si algún día volverá.

Se trata de establecer un distanciamiento no para engañar al otro, sino para curarte tú.

¿Quieres que vuelva tu ex? ¿Quieres estar bien? En ambos casos, la respuesta es: cortar todo contacto. Como mínimo, en la segunda pregunta, ya te has regalado un sí.

Una separación total es un lugar que abrimos para ofrecernos un reencuentro con quienes éramos. También es una invitación a racionalizar. Tienes la capacidad de querer a muchas personas al mismo tiempo.  En el momento en que tú decidas compartir tu vida con una en concreto, como condición básica deberías empezar por establecer que esa persona también te quiera.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog