Revista Ciencia

Cómo se siente la depresión en el trastorno bipolar

Por Davidsaparicio @Psyciencia

Cuando estudiamos la caracterización del trastorno bipolar, aprendemos que:

  • Es una condición potencialmente incapacitante y de por vida; 
  • La persona que lo padece puede presentar episodios de manía (estado de ánimo anormalmente elevado o irritabilidad y síntomas relacionados con deterioro funcional grave o síntomas psicóticos durante 7 días o más);
  • También puede tener episodios de hipomanía (estado de ánimo anormalmente elevado o irritabilidad y síntomas relacionados con disminución o aumento de la función durante 4 días o más); y 
  • Episodios de estado de ánimo deprimido.

El trastorno bipolar suele ser comórbido con otros trastornos como los de ansiedad, el mal uso de sustancias, trastornos de personalidad y trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) (National Institute for Health and Care Excellence (Great Britain), 2019).

Algunos de los síntomas asociados son la desesperación, la pérdida de interés y energía, dificultad para dormir, problemas para concentrarse, cambios de peso, pensamientos suicidas. Pero, ¿cómo se siente realmente una persona con trastorno bipolar y con episodios depresivos?

Colleen King, psicoterapeuta especializada en el tratamiento de personas con trastorno bipolar, depresión y ansiedad, comparte algunas cosas que aprendió sobre la forma en que sus pacientes con trastorno bipolar experimentan distintos episodios en sus vidas, con el objetivo de ofrecer una mejor comprensión de lo que puede estar experimentando alguien que vive con esta condición.

Cómo se siente un episodio depresivo

Las personas con trastorno bipolar pueden experimentar estados mixtos o manía disfórica. Esta puede vivirse como un estado de ánimo insoportablemente difícil que combina simultáneamente síntomas de manía y depresión, aunque los típicos sentimientos de euforia esten ausentes. También suelen experimentar agitación psicomotora, insomnio, ansiedad e inquietud. A veces experimentan irritabilidad o ira.

Durante un episodio depresivo, los pacientes pueden sentirse destrozados o que ya no les importa nada; sin motivación ni pasión para nada excepto dormir. Pueden llorar todo el tiempo y sentirse frustrados e impotentes. Temen que nunca volverán a sentirse “normales”.

“Para mí, la depresión se siente como si me hubieran robado mis habilidades cognitivas, emocionales y físicas”, dice King, quien también vive con trastorno bipolar. Ella lo describe como si estuviera caminando a través de un río de melaza hasta la cintura mientras la niebla la rodea. “Hay una visibilidad mínima y es un desafío moverse”. 

En esos momentos, prestar atención y comprender lo que otros dicen o lo que ella lee o escribe requiere de mucha energía cognitiva. A veces dice lo contrario de lo que ella piensa. A veces, no puede recordar las palabras de los objetos comunes y las tareas de varios pasos tardan días en completarse.

Los episodios depresivos la agotan físicamente. “Siento que me estoy moviendo contra todas las fuerzas de la naturaleza, luchando tan duro como puedo para seguir funcionando”, dice King.

Los episodios depresivos pueden ir más allá de los sentimientos de tristeza y llegar a la culpa, la vergüenza, la ansiedad y el miedo. Pueden destrozar la identidad propia de una persona. “La autoestima vibra como la cristalería en un terremoto, balanceándose con la tierra cambiante que es mi estado de ánimo”, explica King.

Por supuesto, cada persona es diferente y experimentará distintos síntomas durante sus episodios depresivos. Pero sean cuales sean los síntomas específicos, los episodios depresivos suelen tener una cosa en común: pueden ser abrumadores.

Debido a que la depresión puede presentarse después de un episodio maníaco o hipomaníaco, puede sentirse como un gran colapso, y resultar especialmente devastador.

Por ejemplo, durante un episodio maníaco o hipomaníaco, es posible que no necesites dormir mucho y te percibas como más productivo, pero cuando comienza un episodio depresivo, puedes sentir que deseas cancelar todos tus planes y necesitas 16 horas de sueño. Podrías sentir que no vales nada.

Cómo sanar

1. Conoce tus factores desencadenantes

El primer paso es tomar conciencia de lo que estás experimentando. Presta atención a tus propios desencadenantes y síntomas únicos. Escríbelos y pon prioridades. Por ejemplo:

  • ¿Qué significa “cansada” para ti?
  • ¿Cómo es la pérdida de energía para ti?
  • ¿Cuántas horas sueles dormir cuando empiezas a sentir que se avecina un episodio depresivo?
  • ¿Cuáles son los primeros signos de un episodio depresivo para ti?

Es importante priorizar un estilo de vida saludable para controlar los factores desencadenantes. De forma concisa, es fundamental prestar atención a cuatro factores: tratamiento, ejercicio, alimentación y sueño.

2. Crea una rutina

Construir una rutina y adaptarla cuando surgen nuevas situaciones es igualmente importante. Puedes tomar como ejemplo la situación de una paciente de la doctora Louisa Sylvia, directora asociada de psicología en la Clínica Bipolar y el Programa de Investigación del Hospital General de Massachusetts.

Su paciente  se convirtió en cuidadora de un amigo. Debido a que el amigo vivía a varias horas de distancia, su rutina se interrumpió por completo, lo que provocó estrés y sentimientos de agobio.

En respuesta, Sylvia y su paciente crearon nuevos hábitos matutinos y vespertinos. En lugar de levantarse y subirse directamente al auto, la paciente comenzó a despertarse más temprano. Desayunaba en casa y paseaba a su perro. Para que su viaje fuera más placentero, escuchaba audiolibros y su música favorita.

Encontró una actividad, la jardinería, que disfrutaba en la casa de su amigo. Sylvia también le ayudó a repensar sus viajes: como cuidadora, en realidad estaba haciendo un trabajo maravilloso.

(Sylvia es autora del libro “El libro de trabajo de bienestar para el trastorno bipolar” y coautora del libro “El libro de trabajo del trastorno bipolar II: manejo de la depresión, la hipomanía y la ansiedad recurrentes“. En ellos puedes encontrar más herramientas e información sobre el trastorno bipolar).

Cuando King experimenta un episodio depresivo, también tiene un plan, el cual incluye:

  • Asegurarse de que su psiquiatra y terapeuta sepan lo que está pasando;
  • Recurrir a sus seres queridos en busca de apoyo;
  • Regular sus horarios de sueño;
  • Consumir alimentos nutritivos;
  • Meditar;
  • Mover su cuerpo.

3. Acepta el poder y la protección de decir no

Tan fundamental como una rutina saludable es aprender a decir no, sostener tus límites y mantener tu bienestar mental. Por ejemplo, puedes:

  • Reducir las obligaciones siempre que sea posible;
  • Enfocarte en tus prioridades inmediatas;
  • Practicar actividades nutritivas, como estar en la naturaleza, crear arte y pasar tiempo con tus seres queridos.

King utiliza habilidades de afrontamiento que enseña a sus propios pacientes, incluidas la atención plena y las técnicas cognitivas conductuales. Socializa menos pero no te alejes por completo de los demás, y practica la autocompasión.

“Reconocer la enorme cantidad de energía que se necesita para manejar un episodio depresivo me ayuda a ser gentil y amable conmigo misma. Cuando las dudas sobre mí misma asaltan mi identidad y valor, repito mantras de autocompasión”, dice King.

En este artículo podrás encontrar 5 estrategias de afrontamiento para el trastorno bipolar.

Próximos pasos

Manejar el trastorno bipolar y superar un episodio depresivo puede tomar tiempo y paciencia, hasta descubrir qué funciona mejor en tu caso. Es muy probable que tengas que acordarte de comer algo nutritivo, dar un paseo, hablar con un amigo y llorar tus viejas expectativas. Recurrir a un equipo de apoyo, de seres queridos y profesionales, puede ser poderoso en estos tiempos.

La depresión nos engaña haciéndonos creer que va a durar para siempre. Y lo hace cuando estás en un episodio depresivo, dice King. Ella se recuerda a sí misma que ha experimentado episodios depresivos y ciclos antes y recuperó su salud y estabilidad.

Sylvia también les recuerda a sus pacientes que estos episodios terminan. “No durará para siempre, y no durará en su punto más alto para siempre”.

King se dice a sí misma que recordará la alegría y se sentirá completa nuevamente, como antes. Y con tratamiento, tu también lo harás. No te rindas.

Referencia bibliográfica: National Institute for Health and Care Excellence (Great Britain). (2019). Bipolar Disorder: Assessment and Management. https://books.google.com/books/about/Bipolar_Disorder.html?hl=&id=r0VnzQEACAAJ

Fuente: Psychcentral


Volver a la Portada de Logo Paperblog