¿Cómo vive una Fallera Mayor de Valencia la Crida?

La Crida, sin duda el acto más esperado, emocionante y multitudinari0 del año, siempre con permiso de las mascletàs; el que dará comienzo a las Fallas de 2014. Los falleros se agolpan en la renombrada Plaza de la Crida con ganas de que empiece la fiesta, una fiesta que sólo dará comienzo cuando ella, la Fallera Mayor de Valencia, pronuncie las palabras que, sea el día que sea, nos hacen plantarnos en un visto y no visto en el mes de marzo. Si para los falleros se trata de un día muy intenso, ¿cómo será ponerse en la piel de una Fallera Mayor de Valencia? Sandra Muñoz Pérez, Fallera Mayor de Valencia del 2012, nos cuenta cómo se vive este día, desde la Macrodespertà, hasta que finaliza la jornada con la ofrenda a la Virgen de los Desamparados en la Basílica.

¿Cómo se viven los días previos a la Crida y más al ser un fin de semana tan intenso?
Los días previos a la Crida tenemos una agenda tan apretada que ni siquiera da tiempo a pensar en la misma, hasta prácticamente esa tarde. Yo recuerdo que fueron los momentos previos a llegar a las Torres, cuando en el coche oficial, al empezar a ensayar el discurso con el vicepresidente que me acompañaba, empecé a notar los nervios.

¿Se te da algún tipo de directrices a la hora de redactar el texto?
A diferencia de lo que se piensa respecto a que el texto de la Crida de que nos lo dan hecho, cada Fallera Mayor se prepara y personaliza su texto según ella misma, sin tener directrices de ningún tipo, salvo el precedente de otras falleras mayores en cuanto a estructura del discurso se refiere, y en cuanto a palabras claves que nunca pueden o deben faltar en una Crida.

¿Cuánto tiempo estuviste preparándolo? ¿Hiciste algo en especial?
La verdad es que no todo el tiempo que me hubiera gustado dedicarle. El mes de febrero es tan ajetreado que, cuando quise darme cuenta, se me había echado el tiempo encima. Casi en los días previos, y en el poco tiempo que tenía, por las noches, empecé a redactarla, después retocarla, y ensayarla, con ayuda de mi familia. Y, cada día, antes de irme a dormir, la leía para así retenerla.

¿Qué se siente al llegar a las Torres y ver a la gente?
Es difícil de explicar lo que se siente cuando ya al bajar del coche, con las Torres delante impidiéndote ver más allá, sólo escuchas el jaleo de miles de voces. Pero en el momento de subir las escaleras, las piernas empezaron a temblarme y el corazón se aceleraba al son de la música y de las miles de personas que allí nos esperaban. Un momento irrepetible fue cuando ya arriba de la tarima, me asomé y ví la alegría y euforia de todos los allí presentes; pude comprobar que nada tenía que ver con lo que había sentido hasta entonces.

¿Veías a tu familia y a tu falla? ¿Qué sentías en ese momento?
Mi falla estaba desde varias horas antes preparada para coger buen sitio, llevaban una pancarta enorme con mi foto y unas palabras de apoyo, y en el momento en que aparecimos en las Torres, pude localizarlos enseguida. Mis padres estaban justo debajo de nosotras y, tal y como me ocurre siempre, su compañía me transmitió tranquilidad. Recuerdo, además, que cuando la alcaldesa me dio la llave de la ciudad, la cogí y miré enseguida hacia donde estaban ellos como diciendo: mirad lo que tengo!!!!

¿Recuerdas alguna anécdota de ese día?
Sólo puedo decir que es uno de los días que marcan de verdad, pues desde las 7 de la mañana que empieza la ofrenda a Santa Bárbara, la macrodespertá, pilota valenciana… y hasta la misma noche que finaliza con la ofrenda a la Virgen de los Desamparados, todo, absolutamente todo lo que ocurre ese día, es especial. Y, como anécdota, a la vista de todo lo que nos esperaba ese fin de semana y conociendo que mi punto débil es la garganta, me pasé todo el día con el propoleo en mano para evitar que la afonía me jugase una mala pasada.

¿Cuándo acabaste el discurso qué sentiste?
Satisfacción. Creo que, mejor o peor hecho, cuando terminas un discurso con esa responsabilidad, en el que debes saber transmitir toda la positividad de nuestra Fiesta, sólo puedes sentir descanso y satisfacción, pues sólo el hecho de poder dirigirte a miles de personas, es más que gratificante.

¿Cómo recuerdas el ‘pasacalles’ de las Torres de Serrano hasta la Basílica de la Virgen, un momento también muy especial y que pasa más desapercibido?
Creo que, como bien dices, es un momento que pasa desapercibido y, sin embargo, es uno de los momentos más recordados y en que mejor se siente el cariño y respeto de la gente y es que es increíble ver como un pasillo se gente, te espera desde la salida de las Torres y hasta la misma puerta de la basílica, aplaudiendo y dedicando palabras bonitas.

¿Qué le aconsejarías a Carmen para hoy?
Una vez más que disfrute del momento, que se pasa muy rápido, y que es realmente impresionante. Que respire bien hondo y se empape del cariño y energía de la gente y el discurso saldrá por sí solo. Estoy segura que lo hará muy bien.

¿Dónde tienes guardada las llaves de la ciudad que te dieron?
La tengo en su cajita en un armario con todos los recuerdos más especiales, como por ejemplo, mi banda.

Habrás visto la Crida en vídeo muchas veces después ¿Qué se siente al verla?
Esa misma noche, estaba tan emocionada que al llegar a casa, hice a mis hermanas que volvieran a verla conmigo para ser consciente, una vez más, de que todo había sido realidad, aunque sabía que nada tendría que ver, con la sensación allí vivida y, de la misma forma, lo hice para hacerme una autocrítica.
¿Crees que se debería hacer más partícipe a la Fallera Mayor Infantil de Valencia?
La tradición marca que sea la Fallera Mayor quien se dirija a la gente en el acto de la Crida, sin embargo, puesto que la Fallera Mayor Infantil representa a todos los infantiles de la Fiesta, también estaría bien que pudiera dirigirse a ellos. Yo, en mi caso, quise incluir en el discurso a Rocío y a nuestras Cortes de Honor, para hacerlas partícipes también de ese momento.

¿Crida en valenciano o castellano? ¿Crees que una fallera mayor debería hacer la Crida en castellano si se defiende mejor y se ve más segura?
Creo que cada una debe hacer lo que considere más oportuno. Personalmente, y aunque soy castellano parlante, creo que un acto como la Crida, debe hacerse en valenciano, por su oficialidad y solemnidad.

¿Orquesta en la crida sí o no?
Entiendo que una orquesta no es necesaria. Sé que puede ayudar a que la gente se anime más, pero la verdad es que es un día tan esperados por todos, que las mismas ganas, ilusión y la participación de la gente, son suficientes para pasarlo bien mientras se espera el momento de la Crida.

La Crida y la Ofrenda son los actos más destacados de la agenda fallera ¿Con cuál te quedarías y por qué?
Sinceramente, no sabría elegir uno de los dos. Cada uno tiene su importancia y significado especial y, difícilmente se puede escoger entre ambos. La Crida es un acto único e irrepetible que solo muy pocas tenemos el privilegio de poder vivir, es emoción y adrenalina. La Ofrenda, es devoción y sentimiento y, cuando tienes el privilegio de poder cerrar una ofrenda, como Corte de Honor y Fallera Mayor de Valencia, faltan palabras para describir la magnitud de ese momento.

Y ahora… ¿Vives de una manera diferente la Crida ahora después de ser FMV?
Sin duda alguna, la Crida del 2012 marcó un antes y un después en mi vida. Después de haber vivido una Crida en primera persona, las sensaciones que se sienten cuando acudes de nuevo a los pies de las Torres, son ya bien distintas. Saber lo que están sintiendo las personas que ese año la protagonizan, hace que se vivan de manera distinta, pero siempre con la misma ilusión.