Sofía Tinoco Torres
Es una realidad que el mercado laboral en los últimos años se ha vuelto más complicado y muchas personas a pesar de poseer títulos, cursos e idiomas buscan empleo sin éxito, pero otras independientemente de su ocupación o profesión y de sus títulos logran incertarse con mayor facilidad, ¿qué ocurre? bueno la razón se encuentra en algo que hace la diferencia: es decir sus competencias.
¿Qué son las competencias? Estas las podemos entender como las capacidades de poner en práctica los diferentes conocimientos, pensamientos y valores de una forma integrada. Se llama competencia porque como dice la palabra te hace “competente para” esto no es aprenderse algo de memoria, sino que se integra tanto que se convierte en parte de tu personalidad y lo aplicas en diferentes contextos: amigos, familia, colegio, universidad, trabajo, entre otros.
Es importante decir que la competencia no es igual a una habilidad, ya que esta última es parte de lo que traemos todas las personas al nacer, es decir “para lo que sos bueno(a)” puede que seas hábil en deportes, en números, en letras, artes, etc. Pero las competencias son aquellas cosas para las que quizás no somos expertos pero si tenemos el deseo de aprender podemos adquirirlo e integrarlo.
Entonces ¿qué es lo que los empleadores ven de especial en estas personas y por eso deciden darles una oportunidad laboral?
De acuerdo con carrierbuilder.com lo que hace la diferencia son las siguientes competencias:
Esta imágen representa esos aspectos que son el plus para incertarse en el mercado laboral, brevemente explicaré que es cada una:
Disposición a aprender: Nunca sabremos todo, siempre hay algo que podemos aprender, los empleadores necesitan gente con deseos de aprender nuevas cosas, esto es algo que debes fomentar desde ya que vas a empezar la U o estudiar un técnico.
Trabajo en equipo: Cooperar e interactuar con otros es básico, pues tanto empresas como fundaciones y entidades necesitan de personas que puedan trabajar con otros.
Responsabilidad:Se necesitan personas que cumplan con sus tareas, que se comprometan con su trabajo y que puedan responder a las necesidades de las empresas y personas con las cuáles trabajen.
Optimismo: Una buena actitud es clave para destecar en cualquier cosa, ayuda a estar más atento(a) a lo que debes hacer, pero además ante situaciones difíciles se piensa en soluciones.
Adaptación: Es instalarse, acomodarse ante los cambios o situaciones que puedan venir, esto va de la mano con el optimismo una buena actitud ayuda a que las personas se adapten al cambio del cole a la U, de la U a las prácticas y de éstas al trabajo.
Entonces estas son parte de ese atractivo que ayudará a insertarte de mejor y más fácil manera en el mercado laboral, por supuesto que puedes adquirir muchas otras lo cuál sin duda te dará grandes ventajas. Además es cierto que el paso que está antes (si así lo decides) es estudiar en la universidad una carrera o un técnico, pero presta atención a que en este camino puedas incorporar dichas competencias, ¿Cómo? cumpliendo desde ahora con tus tareas del cole o de la U, haciendo las asignaciones en fin… ¡comprometiéndote contigo mismo(a)!
Esto sin duda te abrirá muchas puertas a la hora de enfrentar el tan esperado reto de empezar tu vida laboral.
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