Consejos para adquirir un disfraz medieval

Cuando una personas desea adquirir un traje medieval, debe tener en cuenta una serie de recomendaciones, como lo son los complementos, ya que se recomienda   extremar las precauciones en los complementos destinados a los niños como lo son en el caso de usar arcos con flechas, pistolas, sombreros, diademas, entre muchos otros, comprobando que no tienen partes punzantes ni piezas pequeñas que puedan desprenderse con facilidad y ser tragadas.  
Tampoco deben ser demasiado largos, ya que los niños se pueden lastimar fácilmente con estos accesorios si se tropiezan o se caen. Los sombreros deben quedar completamente ajustados, para evitar que se deslicen sobre los ojos, todo esto es muy importante tenerlo en cuenta al momento de comprar el traje de la época que se pretenda utilizar. 

De la misma forma se recomienda comprar mediante precios en distintos establecimientos y adquirir aquellos que reúnan y cumplan todas las condiciones de seguridad y etiquetado. También hay que guardar el tique de compra o la factura para poder reclamar si aparece algún problema, tal como ocurre en la web Disfracesmimo.com, donde se pueden encontrar todos los disfraces medievales que se quieran. 
 En este aspecto se debe tener en cuenta el control de las fuentes de calor. Muchos disfraces pueden resultar inflamables. Hay que evitar capuchas, pelucas y caretas muy sobrecargadas en las que el riesgo es mayor. Y por supuesto alejar al niño de estufas, bengalas, petardos, fuegos artificiales, mecheros, cigarros encendidos, por lo que una buena asesoría nunca sobra. 
 Igualmente, se debe comprar un disfraz adecuado a la edad de la persona. En el envoltorio del disfraz figura la edad mínima recomendada y también una serie de advertencias e instrucciones que hay que leer atentamente antes de pagar. Con vistas a posibles reclamaciones, conviene guardar la identificación del fabricante y del importador, para que después se no tenga la sorpresa que no se admiten cambios o devoluciones.   
Finalmente se recomienda evitar que el maquillaje entre en contacto con los ojos. Es preferible usar maquillajes al agua, fáciles de aplicar y quitar. Aunque el logo CE no es una garantia absoluta, más vale comprar productos que lo incluyan.