Conservas de pescados. Sabor y calidad en una lata

Desde siempre laconservación de los alimentos ha sido una constante preocupación. Los pescados  altamente vulnerables en un corto espacio de tiempo han sido el principal marco de estudio en este sentido. La clave es eliminar el agua de composición de los mismos, así tras el eviscerado y lavado de los pescados, se sometían a un prensado y posteriormente se cubrían con sal – la sal es higroscópica y absorbe el agua restante- La salazón dio paso a las conservas de pescado. Un proceso más complicado que implica una tecnología más avanzada.

 Tras el eviscerado y lavado de los pescados, se someten a una primera cocción al vapor con salmuera, se introducen en las latas -el enlatado puede ser mecánico o incluso manual para evitar dañar el pescado- y se cubren con aceite, salmuera o la salsa correspondiente. Una vez cerradas las latas, pasan por un proceso de esterilización entre 110 y 121ºC. La esterilización permite conservar el producto sin la necesidad de añadir ningún tipo de conservante. Durante todo el proceso se cuida rigurosamente la calidad del producto final.

Las conservas constituyen un alimento natural muy nutritivo, con proteínas de una calidad excelente y muy ricas en minerales como el yodo, fósforo y calcio ( las sardinas enlatadas se comen con espinas ) y vitaminas del grupo B, A, D y E. Los ácidos Omega 3 presentes en su composición las convierten en un aliado frente a enfermedades cardiovasculares, primera causa de muerte en nuestro pais.

Las conservas de pescados son una alternativa a tener en cuenta. Además de ser un alimento muy saludable, nos permite tener al alcance de la mano una variedad de productos tan perecederos y delicados que no deberían faltar en nuestra despensa. Con sólo abrir una lata, de manera rápida, cómoda y económica, o también para elaborar suculentas recetas.
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