Creatividad, el cimiento del nuevo sistema empresarial

En la actualidad todos aquellos que tenemos una formación académica más o menos amplia, en la mayoría de los casos, casi en la totalidad, cuando terminamos los estudios y pasamos al mundo laboral, ese que nos va a dar nuestro futuro, que nos va a independizar, liberar, ese con el que podremos construir nuestros sueños grandes, medianos y pequeños. Ese mundo laboral del que desde jóvenes oímos hablar cada vez más que nos salvará y nos dará un porvenir, resulta que al aterrizar justo ahí, van pasando los días, las semanas y los meses y nos quedamos anonadados de ver la distancia tan grande, tan inmensa que existe entre la formación recibida y la  profesión ejercida.
Y si es cierto que existe un abismo entre formación y mundo laboral, no lo es menos ni menos importante el abismo existente entre el modelo empresarial con el que hemos crecido y el actual modelo empresarial. Crecimos viendo trabajar a nuestros padres y madres bajo órdenes, imposiciones, presiones, miedos, sometidos a un sistema absolutamente jerárquico dónde jamás llegabas a conocer a tus jefes, y la relación con tu inmediato superior era de sumisión o a la calle. No se pagaba por pensar, por crear, por desarrollar, por tener iniciativa, se exigía únicamente accionamiento para ser los más productivos, los primeros, aunque vendieses humo, no había forma de acceso porque todo eran círculos totalmente herméticos.
Afortunadamente la vida sigue su curso natural, y la sociedad va cambiando, se desarrolla en otros ámbitos explora campos nuevos, camina buscando nuevas fórmulas, nuevas estructuras, construyendo mejores sistemas ambientales y sociales simplemente para aumentar la calidad de vida. Crea, crea y sigue creando sin parar de hacerlo porque sino no habría vida. Porque la actividad es necesaria para estar y sentirse vivo, es el otro alimento que el cuerpo-mente necesita para no perecer antes de tiempo.
¿Por qué el sistema educativo y empresarial no se ha adaptado, o mejor dicho le cuesta tanto adaptarse y crear nuevos hábitos?. Es cierto que cualquier ser humano somos animales de costumbres, y cambiar de hábitos, aunque siempre se dice que es imposible, no es en absoluto cierto. La verdad es que no se cambia por comodidad, porque cambiar significa en la mayoría de los casos reestructurar todo aquello que hemos ido construyendo a base de esfuerzo, sacrificio y trabajo sin parar. Sin querer darnos cuenta que la vida es un ciclo, y como todos los ciclos tiene infinitos comienzos, desarrollos y finales. Nada pero absolutamente nada es para siempre, ni todo está escrito, determinado o sentenciado, todo es y debe ser cambiable. Para eso tenemos la capacidad como seres pensantes de crear, de soñar.
El actual sistema empresarial en que estamos inmersos necesita adaptarse a la sociedad en la que se está desarrollando, estamos pasando de un sistema piramidal a uno bastante más plano, donde aunque sigue siendo necesaria la jerarquía, también lo es y mucho el diálogo, la colectividad, la unión, fomentar y sentirse parte integrante de un equipo. Ser fans de tu trabajo te dará a tí y a tu empresa unos resultados inimaginables. Abrir las puertas al desarrollo y expansión de los talentos, hará sistema empresariales mucho más lineales y flexibles que puedan vivir perfectamente con los cambios que hay, ha habido y habrá. Renovarse o morir.