Revista Comunicación

Crítica del 3x09 "Save Henry" de Once Upon a Time

Publicado el 03 diciembre 2013 por Dro @Drolope
3x09 'Save Henry' Once Upon a Time
Creo que, llegados a este punto, estaréis de acuerdo conmigo en que la tercera temporada de Once Upon a Time lleva ya desde hace tiempo un rumbo fantástico, como nos comentaba nuestra compañera Doralais en sus reviews. Esta vez me toca a mí hablaros del que ha sido, precisamente, mi episodio favorito de la temporada: el 3x09 "Save Henry", que ha tenido como protagonista absoluta a mi adorada Regina. Un episodio así estaba destinado a ser enorme...
¡Spoilers a partir de aquí!
El título del capítulo ya dejaba perfectamente claro que la misión principal era salvar a Henry. Para ello hemos visto a Emma tratando de convencer a los Niños Perdidos de que les revelase cuál era el escondite de Peter Pan, todo ello mientras íbamos viendo una serie de flashbacks del pasado de Regina en el que volvíamos a ver a un Rumple sonriente que "se encontraba exactamente donde quería estar", que estuvo manipulando desde el principio oculto en las sombras, y unos flashbacks, además, en los que volvíamos a ver a Regina cuando el asesinato de su padre todavía estaba reciente. La mejor parte vino después. La parte que todos esperábamos... por fin vimos a Regina en sus primeros momentos con baby-Henry. ¿Se puede ser más extremadamente adorable que estos dos?
Dicen que los bebés son muy perceptivos. Quizá baby-Henry intuyese la oscuridad de Regina, y por eso mismo no parase de llorar cuando ella le sostenía, al contrario que con Blancanieves -que es, irónicamente, su abuela-. Seguramente el bebé intuía que ella era todo bondad, arcoiris y unicornios. Una de mis escenas favoritas del episodio vino cuando Regina, desesperada, le abrazó y le dijo que haría lo que fuese por él, que solo quería una oportunidad, una segunda oportunidad. Y entonces le dio un beso en la mejilla y baby-Henry dejó de llorar. QUÉ MONOS, YO ES QUE NO PUEDO CON ELLOS. Es una historia tan redonda... ¿Quién sería capaz de aceptar a la "Reina Malvada", de quererla incondicionalmente, de ver lo mejor de ella...? Alguien con una visión inocente, alguien noble. Un bebé... es perfecto. Y enternecedor. 

[Fuente]


Tampoco podemos dejar de mencionar el momentazo en que Regina se libera del "árbol del arrepentimiento" riéndose en los morros de Peter Pan -al que finalmente encontraron ella, Emma y Blanca- y diciéndole que ella, a pesar de haber maldecido a toda su tierra, haber asesinado a decenas de personas y haberle arruinado la vida a muchas más... a pesar de todo eso, no estaba arrepentida. Regret Nothing! Por tanto, el árbol en que Pan las había apresado rompió su embrujo y ella recuperó el corazón de su hijo. 
Me ha encantado el episodio no solo por lo que ya he mencionado, sino porque supone un nuevo comienzo. Emma y compañía por fin dejan atrás Nunca Jamás, de regreso a Storybrooke, y toda una serie de nuevas y necesarias tramas parecen dibujarse en el horizonte. Los personajes, además, están felices en su mayoría. Regina está aliviada, Campanilla podría recuperar su magia, Bae ha hecho las paces con Rumple, Wendy volverá a reunirse con sus hermanos los hipsters. Y, lo mejor de todo: se acabaron los cromas cutres de Neverland. Gracias, guionistas, gracias. Y, como pequeño puntazo final, la posesión de Peter Pan del cuerpo de Henry. Este chiquillo es incansable, le reconozco eso, y parece empeñado en arruinarle la vida a toda su descendencia. Ya veremos qué pasa.
¿Y a vosotros, qué os ha parecido el episodio?
¡Hasta la próxima!

Volver a la Portada de Logo Paperblog