Revista Comunicación

Crítica del 4x07 "Mockingbird" de Game of Thrones

Publicado el 21 mayo 2014 por Dro @Drolope
Sansa 4x07 Game of Thrones
Los capítulos de la cuarta temporada de la joya de HBO continúan avanzando a ritmo semanal, y en esta ocasión toca comentar el 4x07 "Mockingbird". Quizá sea por el entusiasmo con el que la hemos comenzado, por la inmensa evolución que están viviendo los personajes, por el hype o por Peter Dinklage a secas, pero lo cierto es que la cuarta temporada ya se está configurando como una de las mejores de Game of Thrones, por no decir más. No ha habido un solo capítulo que no haya sido disfrutable, y es tremendamente fácil pasárselo como un enano con cualquier historia -excepto cuando sale en escena Bran Stark y uno se muere de aburrimiento porque lo más interesante que sucede son los monólogos de Hodor. No sé vosotros, pero yo le recomiendo que desayune All Bran-. Game of Thrones no es perfecta pero, dentro de lo que son su contexto y su género, sí roza lo que podría llamarse perfección o, como mínimo, lo épico.
[Antes de comenzar la crítica propiamente dicha, tengo que disculpar a mi compañero Juan, que es el que suele hablaros de Game of Thrones. En esta ocasión se encuentra muy ocupado por temas de estudios (los universitarios y alumnos de 2º de Bachiller le comprenderéis) y no le ha sido posible pasarse por aquí como cada semana. Por esos motivos seré yo -Isidro, Dro, Isildur, Juan II, como prefiráis- quien se ocupe durante un tiempo de las críticas de cada episodio. Según me informan, la petición en Change.org para exigir que vuelva Juan ya está en marcha. Él me pide que seáis comprensivos y os manda sus besos y bendiciones].
Tyrion 4x07 Game of ThronesDurante este capítulo, cuyo título podría recordar a la saga de 'The Hunger Games', no ha habido ninguna escena que involucrase de manera destacada acción o "espectacularidad", y quizá por eso más de uno no lo haya disfrutado en exceso. Yo, personalmente, soy de los que aborrecen las batallas físicas (las acepto en su justa medida) y de los que prefiere una buena guerra dialéctica, de esas que tan bien se le dan hacer a personajes como Olenna Tyrell, pero es comprensible que cada espectador busque y aprecie ciertos aspectos de la serie antes que otros. Este episodio ha sido muy humorístico, relajado en comparación con otros, y ha concentrado en pantalla las historias de la mayoría de mis personajes favoritos. Impagables las escenas de Tyrion Lannister, que desde su discurso del final del 4x06 "The Laws of Gods and Men" parece estar pidiendo a gritos un Emmy para Peter Dinklage. En una de ellas, una sencilla pero horrible historia de infancia narrada por Oberyn Martell bastó para sumergirnos por completo en la serie y para que comprendiéramos realmente hasta dónde llega, y desde cuándo, el odio de Cersei a su hermano pequeño. Su padre quiere perderle de vista y llevarlo con la Guardia de la Noche a luchar contra los Caminantes Blancos bajo la órdenes de un muchacho que no sabe nada -aparte de cuidados capilares-, pero esos planes podrían truncarse de manera inesperada gracias a el segundo de los Martell. Oberyn, que parece admirar en cierto sentido al Lannister, ha decidido luchar por él contra la Montaña.
Repartidas a lo largo del mundo se encuentran, por una parte, Melissandre, la mujer cuya vagina ciertamente parece ser oscura y estar llena de terrores. La sacerdotisa pelirroja mantuvo una interesante conversación con la mujer de Stannis, el aspirante frustrado a Rey que a todo Poniente le da igual desde la batalla de Aguasnegras, en la que le insistía en que su hija pequeña debía viajar con ellos. Y lo hizo desnuda, por supuesto. Esto me pareció injusto porque, en la otra punta del mundo, Daenerys Targaryen, en un alarde de demostración de su poder, invertía las tornas y, en vez de ser ella la desnuda, le exigía a Daario que fuera él quien se quitase la ropa. ¿Y por qué me parece esta situación injusta, decía? Porque los desnudos masculinos en Game of Thrones son más superficiales y breves (el actor de Daario solo se quitó la camiseta, ese culo que apareció en pantalla bien podría haber sido de otro hombre) mientras que en los desnudos femeninos sí que se ceban, no hay más que ver a Melissandre y a los planos de todo su cuerpo. Me gustaría más igualdad en ese aspecto.

Lysa loca del coño 4x07 Game of Thrones

Esta sí que necesita desayunar All Bran


Ya en Poniente, nos encontramos con Brienne de Tarth y su encantador Sancho Panza. Un golpe de suerte les reunirá con el antiguo amigo gordito de Arya, quien confiará en ellos y les revelará -por fin- que no sabe nada de Sansa Stark, la chica a la que buscan, pero que sí es consciente de que su hermana sigue viva. Por pura lógica, se dirigirán hacia el castillo de Lysa Arryn al mismo tiempo que, irónicamente, la propia Arya, que viaja allí con el Perro (no puedo ser más fan de esos dos). Ya en el castillo, aguardará ansiosa su visita la pelirroja en cuestión, Sansa, que parece tener un imán en su preciosa cara para atraer a todos los perturbados en cinco kilómetros a la redonda. Primos a los que dar guantazos por reventar tus castillos de nieve, amantes de tu madre muerta que te besan y tías locas que te quieren tirar por el Ojete de la Luna: las aventuras para esta chiquilla nunca terminan. Meñique, en un movimiento predecible pero no por ello menos impactante (brutal la interpretación de todos los actores en esta escena final), al estar ya casado con tita Lysa y tener todos los poderes, decidió mandar a la buena señora a volar por el Ojete en lo que fue un gesto cargado de agrio y divertido simbolismo, no exento de karma. Las tramas de Sansa por fin empiezan a ser realmente interesantes.
Y a vosotros, ¿qué os ha parecido el episodio? La semana que viene más y, con toda probabilidad, mejor.

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