Crítica: “La trampa de la muerte” (Devil)

Está claro que M. Night Shyamalan no atraviesa su mejor momento artístico. Desde “Señales” no tiene un éxito rotundo en taquilla (aunque “El bosque” no fue tan mal) y hace nada parece que le han quitado de raíz la loca idea de seguir con la saga Airbender. No me extraña…

“La trampa del mal” no está dirigida por él. Nace de una idea suya (ni siquiera ha escrito el guión) y por ahora formará parte de una trilogía de películas independientes llamadas “The Night Chronicles” (Sí, es tan egocéntrico como nuestro adorado Jim Cameron). Lo bueno del proyecto es que cuestan muy poco (ésta por ejemplo ha costado 10 millones de dólares) y sin esfuerzo podrán recuperar cómo mínimo el presupuesto. Aunque más vale que prescindan de ese “M. Night Shyamalan presents…” porque ahora mismo es más un lastre que un aliciente.

Bueno, ¿qué os puedo contar de “Devil”? Que básicamente es una chorrada de película bastante importante. La historia gira en torno a 5 desconocidos que se quedan encerrados en un ascensor sin saber que el demonio es uno de ellos. Ha llegado a la tierra gracias a un suicidio de un trabajador del edificio y planea cobrarse cuantas vidas hagan falta para conseguir sus objetivos (no demasiado claros, todo hay que decirlo).

Tras unos títulos de crédito bastante originales a medio camino entre “Origen” y “La habitación del pánico”, una voz en off nos destripa toda la película (por si el título no nos había dado suficiente información sobre la trama). Ya sabemos a grandes rasgos qué pasará y por qué. Creo que “el enigma” de quién de los cinco encerrados será la encarnación del mal no es suficiente para mantener la tensión. Y más cuando la resolución está cogida tan por los pelos y de una forma tan trillada.

A pesar de que la película se desarrolla en un ascensor, no consigue crear sensación de claustrofobia en ningún momento y aunque su duración hace que se pase muy rápido, los minutos transcurren sin llegar a profundizar en los personajes todo lo que deberíamos. Sólo el protagonista (interpretado por Chris Messina) tiene cierta credibilidad, y eso a pesar de que está rodeado de frases bastante estúpidas y tópicos topiquísimos como el sudamericano supersticioso y creyente y algunas muertes anunciadas. Por no hablar de algunas reacciones, totalmente absurdas y descafeinadas (Yo si viera algo parecido a la escena final en la vida real me volvería loco mientras que en la película parece lo más normal del mundo y se acepta como si tal cosa).

Conclusión: “La trampa del mal” no es una película horrible pero desde luego se queda muy lejos de llegar a ser una buena película de terror. Merece la pena verla en cine? Yo pienso que ni de coña. Igual para un sábado por la tarde tirado en casa sin nada que ver no es mala opción (aunque en esos casos siempre se debería tirar de clásicos ochenteros de aventuras XD)

Tiene un buen diseño de producción y algunos planos bastante originales, algo que parece aumentar la calidad del conjunto, pero es sólo una ilusión. En realidad todo está cogido con pinzas o simplemente inventado por salir del paso con una base demasiado inestable. Vamos que al final me quedé pensando: “¿Para esto he gastado 77 minutos de mi vida? Pues vaya…”. Eso sí, los posters chulísimos! Algo bueno tenía que tener hombre! XD