Revista Salud y Bienestar
Un
estudio de Psicología Social dirigido por la Universidad de Toronto
publicada en Journal
of Personality and Social Psychology evaluó
a un grupo de personas con relaciones heterosexuales y homosexuales
para determinar como influyen las creencias y los medios de
comunicacion en la relacion sexual. La fase de luna de miel dura
alrededor de dos a tres años, donde la satifaccion es alta, entre
tanto sabemos que los desacuerdos en la esfera sexual son algo
inevitable con el tiempo, la vida sexual es como un jardín, y
necesita ser regada y alimentada para mantenerla. La investigación
demostró que a menudo hay aspectos tanto del crecimiento sexual y
creencias sexuales que determinan el destino sexual del individuo,
mientras que muchas mujeres son ávidas consumidoras del alma gemela
y las historias románticas en realidad son más propensas es a creer
que el sexo requiere trabajo en una relación a largo plazo. Esto
podría ser porque la satisfacción sexual necesita más trabajo para
las mujeres, por lo que es más alta en la escala de crecimiento
sexual. Mientras que las creencias de crecimiento sexual pueden
amortiguar el impacto de los problemas en el dormitorio, no ayudan si
los problemas se vuelven demasiado importante. También hay evidencia
de que pueden estar dispuestas a hacer cambios en su vida sexual por
el bien de su pareja, pero sólo si están convencidas de que son su
verdadera alma gemela. Las personas que creen en el destino sexual y
utilizan su vida sexual como un barómetro sobre su relación y los
problemas de la igualdad para las personas mayores como un todo
piensan que pueden resolver sus problemas sexuales, pero no dejan que
esto afecte su satisfacción con la relación. Los resultados ponen
de relieve la importancia de que los consejeros y los médicos que
tratan de ayudar a las parejas que luchan con la satisfacción sexual
promuevan la idea de que los problemas en el dormitorio son normales
y no significa que la relación este automáticamente en problemas.