Revista Opinión

Danzón y son

Publicado el 13 junio 2017 por Carlosgu82

Ese fue el primer danzón tocado en Cuba; fue el 12 de agosto de 1877.

El danzón es un género musical que nace de la contradanza y el cinquillo.

En sus inicios lo interpretaron orquestas compuestas por violines, contrabajo, trombón, cornetín, clarinete, trompeta y güiro; este último marca el ritmo del género.

Se baila en parejas, el hombre imprime la fuerza y la mujer realiza las florituras, se baila en un espacio reducido.

Como autores importantes podemos citar a Miguel Faílde y Manuel Saumell, entre otros. Y entre los intérpretes más conocidos están: la Orquesta Belisario López, la Orquesta de Arcaño y sus Maravillas.

Después aparece, también en Cuba, el son; que se trata de una mezcla de ritmos africanos, españoles e indígenas.  El son se caracteriza por la repetición de una frase, de longitud variada y cantada a una sola voz.

El son se interpreta con trompeta, guitarra, bajo e instrumentos de percusión, como los bongos, las maracas, el güiro y las claves, entre otros.

Los autores más conocidos del son, en sus primeros años, son Miguel Matamoros, Sindo Garay y Rosendo Ruiz; también destacan Beny Moré, el trío Matamoros, el septeto Habanero, el Dúo Los Compadres y otros.

Actualmente se interpreta mezclado con otros ritmos, y entre las orquestas de más renombre están La original de Manzanillo, Juan Formell y los Van Van, Adalberto y su son, entre otras muchas.

Es un ritmo muy aceptado por la población y que se disfruta mucho por el público de cualquier edad.

Estas son las características de algunos de los instrumentos mencionados: 

Bongo: de percusión, de origen afrocubano, con sonido hueco y profundo. Fabricado en madera maciza o tablillas. Es una caja cónica o cilíndrica. Los bongos están emparejados y unidos horizontalmente por una barra o soporte, con la misma altura y diferente diámetro. Por encima se cierra con un parche de membrana o material plástico cuya tensión puede graduarse cuando los parches están atornillados. Se percuten golpeándose con los dedos o palmas de las manos o con baquetas. Se logran múltiples efectos y son muy utilizados en danzas y bailes populares latinoamericanos.

Maracas: sonajas musicales en número de dos. Tradicionalmente se fabricaron a partir de calabazas secas con judías o cuentas y un mango para sacudirlas. Se trata de una derivación del sonajero africano. Las modernas están hechas con plástico o madera. Son un componente primordial en las orquestas latinas, con la función de producir los ritmos característicos del son.

Güiro: instrumento de percusión de origen africano que pertenece al grupo de los raspadores. Es una especie de calabaza hueca, alargada y con estrías. Se raspa con una varilla metálica o con un peine. En el siglo XX algunos compositores como el ruso Ígor Stravinski y el francés Maurice Ravel lo han incorporado a la orquesta clásica.

Claves: también de percusión. Son dos pequeños bastones redondos de unos 10 cm de longitud, construidos con madera dura y maciza. Con sonido muy agudo al golpear un palo contra otro.


Volver a la Portada de Logo Paperblog